MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
La tasa de inflación interanual de Turquía se situó el pasado mes de enero en el 64,86%, frente al 64,77% de diciembre de 2023 y por encima también del 57,68% registrado en enero del año pasado, lo que supondrá un desafío para el nuevo gobernador del Banco Central de Turquía, Fatih Karahan, designado ayer tras la dimisión de Hafize Gaye Erkan, la primera mujer que había ocupado el cargo en toda la historia del país.
Según los datos publicados este lunes por el Instituto Estadístico Turco (Turkstat), la media móvil de la inflación interanual de doce meses se situó en enero en el 54,72%, por encima del 53,86% de la referencia hasta diciembre, aunque por debajo del el 72,45% registrado en el mismo mes de 2023.
En términos mensuales, el IPC turco avanzó un 6,70%, acelerándose sustancialmente respecto del alza mensual del 2,93% en diciembre. En el primer mes de 2023, la subida mensual de los precios fue del 6,65%.
En cuanto a la variable subyacente, que excluye de su cálculo los alimentos no procesados, la energía, las bebidas alcohólicas, el tabaco y el oro por la volatilidad de sus precios, esta se situó en el 70,48%, ligeramente por debajo del 70,64% de diciembre de 2023.
Las mayores alzas interanuales de los precios se observaron en el sector de hoteles, cafés y restaurantes, con un 92,27%, seguido del sector educativo, con una subida del 79,81%, y del sanitario, con un 78,57%.
Por su parte, el menor incremento anual de los precios fue del 40,62% en ropa y calzado, así como del 45,99% en vivienda y del 46,40% en las telecomunicaciones.
En su reunión del pasado mes de enero, el Comité de Política Monetaria del Banco Central de Turquía, liderado aún por Hafize Gaye Erkan, decidió elevar la tasa de referencia en 250 puntos básicos, desde el 42,5% hasta el 45%, aunque la institución indicó que sería el final del ciclo de endurecimiento de su política monetaria.
Desde que Hafize Gaye Erkan asumió el cargo de gobernadora del Banco Central de Turquía en junio de 2023, la entidad ha acometido un giro radical hacia la ortodoxia en su política monetaria, que ha elevado el tipo de referencia en 3.650 puntos básicos, desde el 8,50%, antes del nombramiento, hasta el actual 45%.
Sin embargo, este fin de semana, Gaye Erkan anunció su dimisión como banquera central tras denunciar una “campaña” mediática en su contra a raíz de un escándalo familiar.
“Recientemente se ha organizado en mi contra una importante campaña de asesinato de mi reputación. Para evitar que mi familia y mi inocente hijo, que no tiene ni un año y medio, se vean aún más afectados por este proceso, he solicitado a nuestro Presidente (Recep Tayyip Erdogan) el perdón de mi deber, que vengo cumpliendo con honor desde el primer día”, hizo saber en su cuenta de la red social X.
Erkan se refería así a un artículo publicado por el diario ‘Soczu’, crítico con Erdogan, que publicó una acusación formulada por un empleado del Banco Central despedido, a su juicio injustamente, por orden de su padre, Erol, acusado también de estar involucrado personalmente en las actividades del Banco Central, del que aprovechaba recursos como oficinas, guardaespaldas o incluso un vehículo oficial.
La gobernadora llegó al cargo en junio de 2023 con la misión de intentar recuperar la confianza de los inversores dada la gran inflación reinante en el país, así como el desplome de la moneda nacional, la lira. El ministro de Economía turco, Mehmet Simsek, aseguró que la dimisión de Erkan no afectará a la política monetaria del país.
Su sustituto en el cargo y sexto gobernador desde 2018 será Fatih Karahan, el número dos de la dimitida y antiguo economista en la Reserva Federal de Nueva York.