Patronales y transportistas demandan “soluciones de emergencia”
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 21 (EUROPA PRESS)
El Gobierno trabaja en un plan de movilidad para estudiar “posibles rutas de desvío” a la A-6, después de los derrumbes del viaducto que mantienen cerrada la autovía de conexión entre Galicia y la Meseta.
Así lo ha trasladado el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, ha informado de quecon motivo de la reunión mantenida en A Coruña esta tarde de martes con representantes de empresas del sector del transporte y patronales de la Comunidad.
Destaca que se buscará “acortar tiempo” en el paso a través de Pedrafita con soluciones a “corto plazo” en paralelo a los arreglos en la A-6. Mientras, se trabaja en “esclarecer las causas” de lo sucedido en el viaducto para avanzar en soluciones, si bien aboga por “priorizar la seguridad”.
Todo ello “sin escatimar medidas de tipo económico y personal”, con los “mejores especialistas”, según ha trasladado Miñones, que asegura que el Gobierno es “sensible” con el sector.
DEMANDAS DEL SECTOR
Al respecto, el presidente de la Confederación de Empresarios deA Coruña (CEC), Antonio Fontenla, y el presidente de la Asociación Coruñesa de Transportes Discrecionales y Especiales (Acotrades), Ramón Devesa, han reclamado al Gobierno que habilite ya los fondos necesarios para reponer el viaducto y agilice los trámites para recuperar cuanto antes esta infraestructura.
Fontenla demanda “soluciones de emergencia, porque el corte de esta arteria logística es una situación de emergencia para Galicia”. “No existe alternativa por otra ruta que pueda utilizarse en condiciones asumibles para las empresas, ni hay posibilidad razonable de desvío por vía terrestre para determinados transportes especiales”, ha avisado.
“El corte de esta infraestructura daña de manera muy importante no sólo la competitividad, sino también la misma viabilidad, de las empresas en sectores de enorme relevancia para nuestra economía. Y es máxima la preocupación del sector logístico gallego, ya muy castigado por la crisis de los combustibles; así como del sector de renovables, máxime en un momento en el que su expansión con nuevos proyectos industriales y energéticos, y su renovación, suponen uno de los ejes tractores en la inversión de los fondos europeos de recuperación en Galicia”, alerta el presidente de la patronal coruñesa.
En declaraciones a Europa Press tras el encuentro, el vicepresidente de Tradime, José Fernández, explica que en la reunión se ha trasladado que se enfocan las tareas en conocer las causas de lo sucedido para poder actuar, mientras reflexiona sobre que “no hay muchas alternativas” a ese paso por Pedrafita.
Si bien apela a la celeridad en las actuaciones, el vicepresidente de Tradime razona que deben hacerse con “cuidado” y “es preferible tomar las decisiones correcta, no por premura, porque una mala decisión en este aspecto puede ser peor que tomar una rápidamente”.
LA XUNTA URGE ALTERNATIVAS
Por otro lado, la conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, junto con el director de la Axencia Galega de Infraestruturas, Francisco Menéndez, ha mantenido este martes un encuentro con el director general del Grupo Pérez Torres –logística eólica–, Santiago Pérez-Torres, y el responsable en el puerto ferrolano, Santiago Menéndez. En el encuentro, ambas partes coincidieron en la necesidad de “urgir alternativas” a corto plazo para la circulación del tráfico de transportes especiales mientras dure el corte de la autovía A-6.
Asimismo, los representantes del Gobierno gallego concordaron en que el cierre de la autovía supone “un problema económico de envergadura, que está afectando a muchos sectores”, además de “suponer complicaciones en el tráfico, la seguridad viaria y perjuicios para los transportistas”.
Ante esta situación, es preciso, inciden, que el Gobierno central “ofrezca alternativas inmediatas que faciliten el tránsito de transportes especiales” hacia el puerto de Ferrol. En este sentido, los integrantes del grupo empresarial trasladaron que el acceso a Galicia a través de la A-52 “triplica” el coste y “multiplica exponencialmente” el tiempo de viaje y el coste.
De hecho, según informó la Xunta en un comunicado, en siete meses desde que se iniciaron las obras del viaducto de O Castro, que “obligó a detener los tránsitos por la A-6, se bloquearon más de cien barcos, que suponen alrededor de 3.000 componentes eólicos”.
Los representantes de la empresa logística temen que esta situación “se agrave” con el cierre actual y la “falta de alternativas” de paso a los transportes especiales, según recoge el mismo comunicado.