MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones se reunirá de nuevo este lunes con las organizaciones de autónomos y los agentes sociales para intentar llegar a un acuerdo sobre el sistema de cotizaciones por ingresos reales que quiere implantar para el periodo 2023-2025 en el colectivo de trabajadores por cuenta propia.
La reunión, que en principio iba a celebrarse el pasado viernes pero que finalmente se aplazó hasta este lunes, arrancará a las 12.00 horas y se producirá apenas unos días después de la última propuesta presentada por el Gobierno a las partes, en la que planteaba que las cuotas a ingresar por los autónomos oscilaran entre los 245 y los 565 euros al mes, dependiendo de sus rendimientos netos.
Esta última propuesta del Ejecutivo, que ampliaba los tramos de 13 a 14, mejoraba la realizada anteriormente en lo que respecta al tramo más bajo de ingresos (menos de 670 euros al mes) y a los tramos intermedios, y encarecía a su vez la cuota propuesta para los autónomos con rendimientos netos superiores a los 4.050 euros mensuales.
En concreto, el departamento que dirige José Luis Escrivá planteó en su última propuesta que aquellos trabajadores que tengan ingresos por debajo de 670 euros mensuales paguen una cuota de 245 euros, lo que supone 5 euros menos que en la propuesta anterior, mientras que la cuota sugerida para los que superen los 4.050 euros mensuales alcanza los 565 euros, 15 euros más respecto al último documento.
En cuanto a los rendimientos netos que van desde los 1.700 euros a los 2.300 euros mensuales, el Ministerio ha presentado tres tramos. En concreto, propone que los autónomos con rendimientos netos de entre 1.700 y 1.850 euros mensuales paguen una cuota de 370 euros mensuales, 30 euros menos de los que planteó en su propuesta anterior para el tramo de ingresos de 1.700 a 1.900 euros.
En la última propuesta de tramos que realizó el Gobierno, el pasado 27 de mayo, propuso para el tramo comprendido entre los 1.900 y los 2.330 euros una cuota de 440 euros, pero ahora ha dividido este tramo en dos: con unos ingresos de 1.850 a 2.030 euros se propone una cuota de 400 euros, y con ingresos de 2.030 a 2.330 euros, la cuota sería de 440 euros.
Así, con los cambios recogidos en el último documento, la propuesta del Gobierno presenta 14 tramos. En aquellos con rendimientos netos de entre más de 670 y 1.700 euros mensuales, que constituyen los seis primeros tramos, los autónomos pagarían a la Seguridad Social entre 260 y 294 euros de cuota mensual.
En los ocho tramos restantes, que van desde los 1.701 a más de 4.050 euros mensuales de rendimientos netos, los autónomos tendrían que abonar a la Seguridad Social una cuota de entre 370 y 565 euros al mes, de acuerdo con la última propuesta del Gobierno.
El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, advirtió el pasado jueves de que si no se alcanza un acuerdo con las asociaciones de autónomos sobre el nuevo modelo de cotización, será el Gobierno el que decida con quién sigue adelante para aprobar la norma.
No obstante, Escrivá mantiene el optimismo en la evolución de las negociaciones y ha asegurado que “el consenso se ha ido materializando y convergiendo”, por lo que todo apunta a “un cierre muy cercano, sin poner un plazo”.
“No nos hemos puesto un plazo concreto, pero es verdad que llevamos mucho tiempo (negociando)”, dijo esta semana Escrivá, que precisó que la mesa de negociación ya está tratando “pequeños ajustes”, por lo que vería “sorprendente” que no hubiera un acuerdo.
LAS ORGANIZACIONES DE AUTÓNOMOS, DIVIDIDAS
Las opiniones de las organizaciones de autónomos en torno a las nuevas cuotas planteadas por la Seguridad Social están divididas, hasta el punto de que una de ellas, UPTA, ha pedido que el Gobierno tome ya una decisión aunque no sea compartida por todos los interlocutores.
En ATA, por su lado, mantienen su rechazo a la propuesta del Gobierno, al considerarla “inasumible”. “Un autónomo que gana 1.700 euros al mes va a tener que pagar 900 euros más de cotización al año, un 26% más, esto es inasumible”, dijo el pasado lunes el presidente de ATA, Lorenzo Amor.
Por su parte, Uatae señaló el jueves en un comunicado que, aunque acudirá al encuentro del lunes con “ánimo constructivo”, no apoyará la última propuesta del Gobierno, pues supone para los autónomos con ingresos iguales o inferiores a 670 euros al mes “cotizar en muchos casos por más del 50% de los ingresos”. “No es razonable ni sostenible socialmente”, denunció.
Uatae indicó que propondrá una “reducción significativa” de las cotizaciones de los autónomos con menos ingresos, “que no necesitan ningún periodo de adaptación para pagar menos en función de sus ingresos”.
Al mismo tiempo, advirtió de que la reforma del RETA no sólo debe procurar obligaciones a los autónomos, también derechos, por lo que reclamará “mayor ambición” en la reforma del cese de actividad.
Por su lado, el presidente de UPTA, Eduardo Abad, espera que la reunión de mañana sirva para cerrar un texto definitivo. De momento, el fin de semana pasado el Gobierno remitió un borrador, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que se establece que la cotización al RETA se efectuará en función de los rendimientos anuales comunicados a Hacienda por los trabajadores por cuenta propia en el ejercicio de sus actividades económicas o profesionales.
Según el borrador, para establecer los importes económicos que fijarán las bases de cotización y las cuotas mensuales definitivas se tendrán en cuenta los rendimientos del trabajo, los del capital mobiliario y los de las actividades económicas obtenidos por cualquiera de los métodos y modalidades que determinan el rendimiento neto de las actividades.
A dichos rendimientos se les aplicará una deducción por gastos genéricos del 7%, salvo en dos supuestos, donde esta deducción será del 3%: en el caso de trabajadores por cuenta propia que ostenten el cargo de consejero o administrador o presten otros servicios para una sociedad de capital si poseen el control efectivo, directo o indirecto de la misma, y en el caso de socios trabajadores de sociedades laborales cuando su participación en el capital social junto con la de su cónyuge y parientes con los que convivan alcance, al menos, el 50%.
Con carácter general, el texto establece la obligación, en el momento de solicitar el alta en el Régimen de Autónomos, de efectuar una declaración de los rendimientos económicos que se prevén obtener por la actividad económica o profesional. En cada solicitud de cambio de base de cotización que hagan los autónomos deberán declarar dicha previsión de rendimientos económicos.
En este sentido, se ampliará de cuatro a seis el número de veces que, durante el año, los trabajadores autónomos podrán solicitar el cambio de su base de cotización. Así, los cambios de base se podrán solicitar cada dos meses y tendrán efectos desde el 1 de marzo (si la solicitud se hace entre enero y febrero); desde el 1 de mayo; desde el 1 de julio; desde el 1 de septiembre, desde el 1 de noviembre y desde el 1 de enero del año siguiente, siempre que se solicite entre el 1 de noviembre y el 31 de diciembre.
El borrador incluye varias modalidades de prestación por cese de actividad temporal o definitivo: la ordinaria y varias extraordinarias. Entre estas últimas se crea una prestación para sostener a los autónomos que se vean afectados por un RED cíclico o sectorial (los nuevos ERTE de la reforma laboral).
En ambos casos se podrá acceder a la prestación si dicho mecanismo afecta al 75% de la plantilla. En el caso del RED cíclico se exigirán caídas de ingresos del 75% durante dos trimestres consecutivos, y en el sectorial, del 50%, entre otros requisitos.