MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana cerrará este jueves el plazo dado a las empresas interesadas en operar las rutas españolas de autobús de largo recorrido, con el objetivo de valorar su liberalización y la entrada de la competencia en esta actividad, como ya pasa en la alta velocidad ferroviaria o en los aviones.
En cualquier caso, el Gobierno ya ha aclarado en varias ocasiones que la actual estrategia estatal no pasa por una liberalización masiva y directa de todos los contratos actuales, barajando un proceso más progresivo en el que coexista el modelo concesional (una única empresa como ya hace principalmente Alsa o Avanza) con uno en libre competencia.
Actualmente, el sector está dividido entre estos dos modelos. Por un lado, la patronal Confebús, en la que están representadas estas dos grandes empresas, defiende el mantenimiento del modelo concesional, entre otros motivos por el posible abandono de las zonas rurales (en las que el sector privado no estaría interesado) o la potencial precarización del sector.
Por otro lado está la patronal Anetra, que defiende claramente la apertura a la competencia, al considerar que se traducirá en un beneficio tanto para los viajeros como para las empresas del sector, que ahora están relegadas a un segundo plano frente a las grandes compañías.
Anetra considera que sus empresas asociadas se encuentran ante una “oportunidad única” para, a través de la consulta abierta por el Ministerio, manifestar de forma unánime su deseo de cambiar “el actual y obsoleto sistema concesional que tanto perjudica sus intereses”, ha comentado desde la patronal.
Una de las empresas que más ha presionado estos últimos años para abrir el mercado es Flixbus, que ya opera en gran parte de Europa, como en Francia o Portugal y donde dicen que no ha habido ningún efecto negativo. Al contrario, han trasmitido en declaraciones a Europa Press que creen que supondría “más frecuencias, menores precios y mayor comodidad”.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ya ha publicado un informe en el que recomendaba la liberalización de todas las rutas de autobús de más de 100 kilómetros de longitud. De esta consulta pública surgirá el modelo que definirá el transporte de viajeros por carretera para las próximas décadas.