MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
El Gobierno ya ha dado su visto bueno a la fusión de Orange y MásMóvil, sin embargo, el Ministerio para la Transformación Digital todavía tiene que autorizar la transferencia de 60 megahercios (MHz) de espectro radioeléctrico a Digi contemplada en las condiciones (‘remedies’) que impuso la Comisión Europea para aprobar la operación, una cuestión que no condiciona el cierre de la operación.
Lo que ya ha autorizado el Ministerio para la Transformación Digital, a través de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, es que la nueva compañía conjunta tome el control de las concesiones de espectro radioeléctrico que ostentan actualmente Orange y MásMóvil.
No obstante, la nueva entidad resultante de la fusión superará los límites de frecuencias que la legislación permite utilizar a un solo operador o grupo empresarial, lo que se conoce como ‘spectrum caps’.
De este modo, la cartera que dirige José Luis Escrivá ha explicado que se aplicará el procedimiento previsto en el artículo 88.6 del reglamento sobre el uso de dominio público radioeléctrico, que da un plazo de cinco meses a partir del cierre de la transacción (con posibilidad de prórroga) a la nueva compañía “para revertir esta situación y adecuar los límites de frecuencias”.
Así, “cualquier transferencia de espectro radioeléctrico excedente”, incluidos los 60 MHz destinados a Digi según la decisión de la Comisión Europea, “tendrá que ser previamente aprobada por el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública”.
Una vez obtenida la autorización del Gobierno para su fusión, Orange y MásMóvil confían en cerrar definitivamente la transacción en un par de semanas y comenzar a operar como una sola empresa.