El Banco Central Europeo (BCE) ha solicitado a las entidades que actualmente operan en Rusia que informen sobre los riesgos a los que se enfrentarían ante distintos escenarios relacionados con las tensiones entre Moscú y Occidente respecto de Ucrania, según indicaron a Bloomberg fuentes familiarizadas con el asunto.
En este sentido, el BCE está trabajando con los bancos en la evaluación de los riesgos de liquidez, así como para las carteras de préstamos, sus posiciones comerciales y de divisas, y su capacidad para mantener las operaciones en funcionamiento.
De este modo, el regulador habría pedido a las entidades que evalúen escenarios en los que se contemplen sanciones económicas severas, así como las consecuencias reales de una invasión, dijeron las fuentes.
Según indicó un portavoz del BCE, la institución está vigilando la situación y mantiene un contacto estrecho con los bancos, así como con los reguladores nacionales, sobre los posibles riesgos que pueden surgir en caso de una escalada del conflicto.
El vicepresidente del BCE, el español Luis de Guindos, ha afirmado este miércoles que la exposición directa del sistema financiero europeo a Ucrania y Rusia “es limitada”, advirtiendo de que los riesgos más importantes serían los derivados de manera indirecta por cómo pueda afectar esta crisis al precio de la energía y a la confianza de los mercados.
“La exposición directa de la banca europea es relativamente limitada”, ha subrayado Guindos durante su intervención en el II Observatorio de las Finanzas, organizado por ‘El Español’, donde ha subrayado que el mayor impacto adverso puede provenir de otros aspectos, como la energía, que ha sido uno de los factores clave en el fuerte aumento de los precios.
Según datos de la Autoridad Bancaria Europea (EBA por sus siglas en inglés), Société Générale, UniCredit y Raiffeisen Bank International estarían entre los bancos de la eurozona con mayor presencia en Rusia.