Advierten sobre la desaceleración del consumo a corto plazo, que podría lastrar el crecimiento
MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
Economistas y empresas de sectores estratégicos consideran que, aunque los precios deberían ir ajustándose, puede que algunos componentes del Índice de Precios al Consumo (IPC) no hayan tocado techo, por lo que piden medidas más contundentes y específicas a nivel nacional y por sectores.
Todos los expertos que han participado en la jornada organizada por el Consejo General de Economistas de España bajo el título ‘¿Qué efectos está teniendo la crisis de precios sobre el sector empresarial español?’, han coincidido en señalar que esta situación podría generar una desaceleración del consumo a corto plazo, que podría lastrar el crecimiento.
Asimismo, han manifestado que sería importante llevar a cabo un pacto de rentas, pero señalan que no basta con que las empresas reduzcan sus márgenes y que los trabajadores moderen sus salarios, sino que también habría que involucrar a todos aquellos agentes económicos que intervienen en las cadenas de oferta y demanda, como son los empleados públicos, pensionistas y todas las administraciones públicas a nivel nacional, autonómico y municipal.
En la apertura del acto, el presidente del Consejo General de Economistas de España, Valentín Pich, ha señalado que “pese a las mejoras en el IPC, hay que ser prudentes”, no solo porque la tasa de inflación subyacente siga siendo elevada, sino también porque ya se están viendo signos de desaceleración de la economía, “por lo que podría incrementarse el déficit, la deuda y la tasa de paro más de lo previsto”.
Pich también ha manifestado que para intentar reducir la brecha y el diferencial que genera una situación de alta inflación como la actual no basta con que las empresas reduzcan sus márgenes y que los trabajadores moderen sus salarios.
Para el presidente de los economistas, si bien podría ser útil elaborar una cierta guía de recomendación para los precios/márgenes y los salarios del sector privado, también cree que “regular en exceso y de forma permanente nunca es una solución idónea para una economía moderna y competitiva”.
Asimismo, Valentín Pich ha recordado que es sumamente importante tener en cuenta que, aunque el proceso inflacionista tiene un comportamiento global, cada país debe poner el acento en su propia inflación, en sus rasgos comunes y no hacer seguidismo de lo que haga el resto.
GRUPO DIA EMPIEZA A NOTAR QUE EL CONSUMO SE RESIENTE
Durante la jornada, el director financiero del Grupo Dia, Jesús Soto, ha coincidido en señalar que la inflación no ha tocado techo todavía y ha explicado que las causas que más afectan a su sector están relacionadas con el shock de oferta, fundamentalmente por el incremento del coste de la energía y de materias primas alimentarias.
“Esta inflación de oferta lo que hará será reajustar precios y costes y estaremos en un nivel distinto de lo que estábamos antes, pero creo que estabilizará en unos meses”, ha apuntado.
Por lo que respecta a inflación de demanda entendida como consumo desmedido que incremente precios, Soto no ve en estos momentos esta situación y advierte de que es posible que el consumo empiece a resentirse en el corto plazo. “En nuestro sector esto se empieza a notar cuando vemos que los clientes incrementan su frecuencia de visita, con una cesta de la compra más pequeña y mayor peso de la marca propia”, ha explicado.
Preguntado por cómo enfrentan en su empresa el alza de precios, Soto ha explicado que han mantenido conversaciones con el equipo de Argentina, “que conocen bien cómo manejarse en estas situaciones”, aunque ha matizado que en ese país la inflación está ligada especialmente a la emisión de moneda y pérdida de su valor ligada al déficit público.
En el caso de Dia, se ha estado realizando un esfuerzo por controlar los incrementos de costes buscando ahorros y mejoras de productividad, según explica el directivo. “La búsqueda de flexibilidad en costes es un tema relevante que está en la agenda de las compañías”, ha asegurado.
Por lo que respecta a los precios al cliente final, Soto ha reiterado: “Es cierto que se han subido pero menos de lo que los proveedores nos han subido a nosotros sus precios, lo que lleva a tensionar márgenes y a seguir buscando eficiencias en el resto de la cuenta de resultados”.
En cuanto a salarios, Soto ha explicado que están en este momento negociando el convenio colectivo en España. “Evidentemente hay presión por incrementarlos, pero hay que entender también la situación de la compañía”, ha enfatizado, aunque ha asegurado que llegarán a un acuerdo que sea adecuado para todos.
“No tengo claro que un pacto de rentas sea la solución, pero llegar a acuerdos entre los agentes sociales siempre es positivo”, ha reiterado.