MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha destacado este martes que en el estudio de Fedea sobre trabajadores fijos discontinuos se “reconoce por primera vez” que los datos sobre fijos discontinuos activos y parados facilitados por su Departamento son “reales”.
“Lo que señala es que le gustaría que desde el Ministerio de Inclusión se hiciera otra segregación de datos, pero vamos avanzando. Ya por lo menos conseguimos que no digan que los datos que estamos propiciando no son reales”, ha señalado Díaz en declaraciones a los medios a su llegada a la reunión de alto nivel sobre el pilar europeo de derechos sociales que se celebra este martes en La Hulpe (Bélgica).
La ministra ha declarado que hay un total de 571.000 fijos discontinuos en España dentro de un “maremágnum de 18 millones de trabajadores”. “Por tanto, vamos avanzando, y a ver de una vez por todas si conseguimos incorporar racionalidad en esta materia”, ha apuntado la ministra, que ha emplazado al PP a “hacer oposición” con otras cosas y no con los datos de fijos discontinuos.
La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) presentó ayer un estudio en el que, basándose en microdatos de la muestra continua de vidas laborales de 2022, cuantificaba el número de trabajadores fijos discontinuos a cierre de 2022 en 1,42 millones de personas, cifra que multiplica por más de dos la existente antes de la reforma laboral de 2021.
De esta cantidad, el 27% (377.000 trabajadores) tiene además otro trabajo, es decir, que está pluriempleado, ya sea con otro contrato fijo discontinuo (esté o no activo) o con otro tipo de contrato o relación laboral, incluyendo el empleo por cuenta propia.
Del total de 1,42 millones de fijos discontinuos cuantificados por Fedea a cierre de 2022, con nueve meses de aplicación plena de la reforma laboral, 731.000 estaban en activo y 753.000 no tenían actividad. Si se excluyen los inactivos que estaban en alta en otros empleos, el total de fijos discontinuos baja hasta 1,25 millones de personas, con 730.000 personas en activo y 518.175 en inactividad.
En este trabajo, elaborado por el profesor e investigador de Fedea Florentino Felgueroso, se presenta un método alternativo para cuantificar el número de trabajadores fijos discontinuos y su desglose de acuerdo con su situación de actividad o inactividad utilizando la muestra continua de vidas laborales de 2022, que constata una estimación “considerablemente superior” a las cifras de la Encuesta de Población Activa (EPA) que publica el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Pero los datos, explicó ayer Felgueroso, sí se acercan bastante a los que comunicó el Gobierno en el Senado en respuesta a una pregunta escrita que formuló el PP. En dicha respuesta se estableció que a finales de diciembre de 2022, el número de demandantes de empleo excluidos del paro registrado por ser fijo discontinuo en período de inactividad fue de 443.078 personas, entre los que 268.402 percibían prestaciones.
“Si al número de fijos discontinuos en inactividad desempleados de la muestra continua de relaciones laborales en esa fecha (518.175) le aplicamos las tasas de fijos discontinuos inactivos de la EPA que son demandantes de empleo inscritos en las oficinas de empleo públicas (79,8%) y los que son perceptores de prestaciones (51,9%), obtenemos cifras muy similares a los comunicadas en el Senado: 413.332 demandantes y 269.124 beneficiarios de prestaciones”, señala Fedea, que ha pedido una mayor rapidez en la depuración de datos, sobre todo al Ministerio de Inclusión, para poder hacer un seguimiento más cercano en el tiempo de la situación de estos trabajadores.
Uno de los motivos que explican la divergencia de los datos de Fedea con los ofrecidos por la EPA, explicó Felgueroso, es que esta encuesta del INE sólo pregunta a los entrevistados por su empleo principal, por lo que no recoge las relaciones laborales secundarias ni aquellas en las que un empleo de carácter fijo discontinuo no se considera el principal.
Fedea puso ayer de manifiesto las limitaciones que presentan los indicadores sobre trabajadores fijos discontinuos procedentes de las series de afiliados a la Seguridad Social y demandantes inscritos en las oficinas públicas de empleo, así como de la EPA.
Para superar estas limitaciones, Fedea propone cuantificar el stock de trabajadores fijos discontinuos a partir de los historiales laborales de afiliación a la Seguridad Social.