CUMBRE BRICS: Bailan los equilibrios de poder, Putin apuesta por Turquía y condena a las sanciones
En la Cumbre de los BRICS, el presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, ha afirmado que los problemas en Líbano y de una Palestina ocupada deben ser el foco para el fin de la guerra en Oriente Medio, ante las tensiones constantes por parte de Israel, a la espera de un posible ataque de respuesta. El presidente iraní señalaba que los poderes occidentales han supuesto un jaque a la paz y la libertad, “aumentando el terrorismo y los problemas”. Así, ha condenado las sanciones de EEUU a su país.
El presidente de China, Xi Jinping afirmaba en la Cumbre de Kazán que la crisis de Ucrania sigue en el foco geopolítico y que el objetivo era reunir a un grupo de países dentro de los BRICS para perpetuar la paz, como un germen de cambio desde el Sur Global. Una paz basada en la unión “sin avivar el fuego”.
Putin señalaba que la Cumbre de los BRICS mostraba un mundo multipolar que desafía al orden global liderado por EEUU, un mundo que ahora presentará a la ONU y que espera que Naciones Unidas lo defienda y apoye. Un reto a Occidente, una condena clara a Israel por la guerra en Oriente Medio, pero la Cumbre no ha condenado a Rusia por la guerra de Ucrania, sino una paz negociada entre Zelensky y Putin.
Turquía preocupa a Europa, porque tiene le segundo ejército más grande de la OTAN, estando alineado con Occidente. Así lo hablaban Putin y el presidente turco, Erdogan.