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El Banco Central Europeo ha cambiado su estrategia en política monetaria, por primera vez desde 2003, hace 18 años. En adelante, el organismo sitúa el objetivo de inflación en el 2%. ¿Cómo interpretar este cambio de rumbo de la entidad central? Olivia Álvarez, Analista de Monex Europe, explica qué implica la medida.
“Es un cambio bastante significativo”, dice Álvarez. Cree que la decisión impactará en el mercado, con más acomodación monetaria y, además, es un simbolismo y un mensaje que lanza de cara al futuro. La analista de Monex Europe explica que el BCE transmite que ya ha desplegado las herramientas expansivas y que su objetivo de inflación significa que, no va a desplegar más, sino que mantendrá estas.
Las implicaciones en política monetaria son a medio plazo. “Ahora transmite que mantendrá un rol activo intento de expansión monetaria, ya que las herramientas que ha desplegado estarán mantenidas en el tiempo, si la meta es llegar a ese 2 %”, dice. Además, el organismo se permite cierta flexibilidad porque si la inflación supera esa barrera, no es necesario reajustar continuamente la política.