Los sobrecostes previstos por encima de 2.390 millones y hasta 2.700 millones serán soportados en un 62,5% por REE y en un 37,5% por RTE
MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
La Comisión Nacional de la Competencia (CNMC) y la autoridad reguladora francesa –la Commission de régulation de l’énergie (CRE)– han adoptado una decisión para revisar el reparto de la financiación del proyecto de interconexión eléctrica ‘Golfo de Vizcaya’, que une Francia y España y que se ha encarecido hasta los 2.800 millones de euros, 1.000 millones más de lo previsto inicialmente.
El coste del proyecto se dividirá inicialmente al 50% entre REE y el gestor francés de redes eléctricas RTE. Sin embargo, los sobrecostes previstos por encima de 2.390 millones de euros y hasta 2.700 millones de euros serán soportados en un 62,5% por la compañía española y en un 37,5% por la francesa.
A pesar del aumento de los costes del proyecto, debido a un contexto de tensión en los mercados de materias primas, las autoridades reguladoras han reconocido que el proyecto “sigue siendo beneficioso” para ambos países y, en particular, para Europa.
Sobre esta última cuestión, cabe señalar que el proyecto se beneficia de una subvención europea de 578 millones de euros del Mecanismo Europeo de Interconexión (MIE).
El proyecto del Golfo de Vizcaya consiste en la construcción de dos enlaces eléctricos independientes, cada uno con una capacidad de 1.000 megavatios, entre Cubnezais (Francia) y Gatica (España). Contempla aproximadamente 400 kilómetros, incluido un tramo marítimo de 300 kilómetros.
Se prevé que el proyecto entre en servicio en 2028, duplicando la capacidad de interconexión entre España y Francia de 2,8 gigavatios a 5 gigavatios.
INCREMENTO DE COSTES
El proyecto del Golfo de Vizcaya fue objeto de una decisión de financiación conjunta adoptada por las autoridades españolas y francesas el 21 de septiembre de 2017. En ese momento, el coste se estimó en 1.750 millones de euros. No obstante, debido a un contexto de mercado desfavorable, los precios de los principales componentes de estos futuros enlaces han aumentado “considerablemente”.
Así, las previsiones actuales prevén un coste de 2.850 millones de euros, con un margen de riesgo de 250 millones. A su vez, los beneficios previstos del proyecto también han aumentado, debido a la evolución prevista del mix energético y del consumo de electricidad en los países europeos, en un contexto de aceleración de la transición energética.