MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
Ciudadanos ha propuesto retirar los controles de seguridad que se mantienen de los acceso a líneas de alta velocidad de las estaciones de ferrocarril titularidad de Adif y Adif Alta Velocidad, al considerar que generan aglomeraciones, entorpecen el trasvase de viajeros desde el avión hacia el tren y suponen una discriminación respecto del trafico de Cercanías.
Así se desprende de una proposición no de ley presentada por el grupo a la que ha tenido acceso Europa Press. Los ‘naranjas’ argumentan que durante los periodos de mayor afluencia de viajeros, como pueden ser Navidad o diversos festivos, son habituales las escenas de largas colas y aglomeraciones en varias de las principales estaciones de tren del país.
Muchas de estas aglomeraciones, según Ciudadanos, tienen lugar por los cuellos de botella que se producen en los controles de seguridad de las estaciones para acceder al AVE, una situación similar a la que se produce en los aeropuertos.
Para la formación esto ha planteado la duda sobre la propia conveniencia de que existan este tipo de controles de seguridad. Ciudadanos ha apostillado que, además, la presencia de controles de seguridad en las estaciones de tren de otros países del entorno europeo se trata de algo “infrecuente, cuando no excéntrico”.
AGILIDAD, COMO EN CERCANÍAS
La propuesta encuentra también justificación en términos de movilidad, ya que una de las principales ventajas competitivas del tren frente al avión reside “en la sencillez de su uso y la inexistencia de barreras”. En opinión de Ciudadanos, la clave del éxito del transporte por ferrocarril reside precisamente en la intermodalidad y la facilidad de transbordo de este a Cercanías, metro, autobús o coches, o acceder directamente a pie.
“Si quiere tener éxito, una red de alta velocidad debe aspirar a parecerse más en términos de accesibilidad a un tren de cercanías rápido que a un avión lento”, ha justificado el grupo.
En lo que respecta a la seguridad, el grupo parlamentario califica como “difícilmente comprensible” la justificación de estos servicios, ya que estos controles solo existen para acceder a los servicios de alta velocidad y no a otros servicios prestados en la red convencional, tanto de largo como corta distancia, donde el daño “puede ser igual o mayor”.
A juicio de la formación, esto deriva en una distinción “arbitraria” que puede generar la “peligrosa impresión” entre la ciudadanía de que hay ciudadanos “de primera y de segunda”, pues aquellos que pagan un billete de alta velocidad deberían pasar un control de seguridad y quienes viajan solo en tren convencional no.