PwC China ha sido multada con 62 millones de dólares, 441 millones de yuanes, y suspendida por seis meses por las autoridades chinas debido a errores en su auditoría del gigante inmobiliario en quiebra Evergrande, en lo que representa la acción más dura hasta la fecha contra una de las Cuatro Grandes firmas de auditoría.
El regulador de valores de China, que ya había advertido sobre fallos en las auditorías de Evergrande, afirmó que PwC China aprobó las cuentas del desarrollador a pesar de que este había inflado sus ingresos en casi 80.000 millones de dólares en los dos años previos a su colapso en 2021; acusa a la auditora de implementar “procedimientos defectuosos” que llevaron a conclusiones erróneas, de “ocultar o encubrir importantes inexactitudes” que aparecían en los documentos financieros de Evergrande y, además, de no señalar “errores contables importantes”. Esta sanción es un claro mensaje del gobierno chino sobre la importancia de la transparencia y el rigor en las auditorías de empresas clave del país.
La multa impuesta a PwC supera con creces la sanción de 31 millones de dólares que recibió Deloitte el año pasado, también en China, por “graves deficiencias” en su trabajo con China Huarong Asset Management, uno de los mayores gestores de deudas incobrables del país.
Esta medida subraya la creciente presión del gobierno chino sobre las firmas auditoras internacionales para garantizar una supervisión más estricta y evitar escándalos financieros que podrían desestabilizar la economía del país.