China se prepara para dar un paso fiscal significativo en 2025 con la emisión de bonos especiales del Tesoro por valor de 3 billones de yuanes (unos 411.000 millones de dólares), marcando un récord histórico. Este ambicioso plan subraya los esfuerzos de Pekín para revitalizar su economía, que enfrenta desafíos importantes, como una débil demanda interna, una crisis inmobiliaria persistente y un potencial aumento de aranceles estadounidenses tras la toma de posesión de Donald Trump en enero.
Un impulso necesario para la economía
La emisión proyectada supera ampliamente los 1 billón de yuanes recaudados este año, con los ingresos dirigidos a fomentar el consumo, modernizar infraestructuras y fortalecer sectores estratégicos como la innovación tecnológica y la fabricación avanzada. De acuerdo con fuentes cercanas a las discusiones, los fondos también respaldarán iniciativas clave, como subsidios para bienes de consumo duraderos y actualizaciones de equipos industriales.
Uno de los principales enfoques será impulsar el consumo interno. Entre las iniciativas planificadas se encuentra un programa que incentiva a los consumidores a cambiar autos y electrodomésticos antiguos por nuevos modelos con descuento. Este enfoque no solo busca dinamizar el gasto de los hogares, sino también fortalecer sectores clave como la manufactura avanzada y los bienes duraderos.
Más allá de los estímulos
Los planes no se limitan al consumo. China destinará una parte significativa de los ingresos a proyectos estratégicos, como la construcción de ferrocarriles, aeropuertos y tierras agrícolas, alineados con las prioridades nacionales en seguridad y desarrollo económico. Otro foco importante será el fortalecimiento de sectores de alta tecnología, incluyendo semiconductores, vehículos eléctricos y energía renovable. Según las fuentes, más de un billón de yuanes se asignarán a estas “nuevas fuerzas productivas”.
Además, los grandes bancos estatales también recibirán apoyo para recapitalizarse, en un contexto donde enfrentan márgenes más estrechos, aumento de préstamos incobrables y una disminución en las ganancias.
El contexto fiscal y económico
La emisión de bonos representará aproximadamente el 2,4% del PIB de 2023, un aumento notable respecto a emisiones pasadas. En comparación, en 2007, China emitió bonos equivalentes al 5,7% de su PIB. Este incremento en la deuda es consistente con los recientes objetivos trazados durante la Conferencia Central de Trabajo Económico, donde se destacó la necesidad de mantener un crecimiento económico estable y aumentar el déficit fiscal.
Se espera que el déficit presupuestario de 2025 alcance un récord del 4% del PIB, mientras que el objetivo de crecimiento económico se mantendría en torno al 5%. Aunque estas metas aún no son oficiales y podrían ajustarse antes de la reunión parlamentaria anual en marzo, reflejan la determinación de Pekín por sostener su economía frente a múltiples presiones.
Desafíos externos e internos
El entorno económico no es sencillo. Las exportaciones, que hasta ahora han sido un pilar para la economía china, enfrentan riesgos significativos debido a las posibles medidas proteccionistas de Estados Unidos. Trump ha prometido aranceles de más del 60% sobre las importaciones chinas, una amenaza que podría obligar a China a redoblar su enfoque en el crecimiento interno.
Sin embargo, los consumidores chinos muestran señales de debilitamiento, afectados por una caída en los precios inmobiliarios y una baja en el bienestar social. Este enfriamiento de la demanda doméstica podría limitar la efectividad de las medidas de estímulo, obligando a las autoridades a encontrar un equilibrio delicado entre deuda y crecimiento.
Un paso decisivo
La emisión récord de bonos refleja la voluntad de Pekín de utilizar todas las herramientas a su disposición para contrarrestar las fuerzas deflacionarias y mantener el rumbo económico. Si bien los riesgos persisten, tanto externos como internos, el ambicioso paquete de estímulos representa una apuesta crucial por reforzar los cimientos de la segunda economía más grande del mundo.