Cepsa está en conversaciones con la compañía nacional de petróleo de Abu Dabi (Adnoc, por sus siglas en inglés) para formar una alianza con la que impulsar su apuesta por el hidrógeno verde.
La compañía española, cuyo principal accionista con más del 60% del capital es Mubadala, el fondo soberano de Abu Dabi, lanzó a finales de marzo su nuevo plan estratégico a 2030, con el que prevé invertir hasta unos 8.000 millones de euros en su transformación para ser líder en la transición energética e impulsar el negocio del hidrógeno verde, biocombustibles y renovables.
En una entrevista al diario ‘The National’ recogida por Europa Press, el consejero delegado de Cepsa, Maarten Wetselaar, indicó que la energética está en conversaciones con Adnoc para está posible alianza, que podría tomar forma a través de inversiones conjuntas en el desarrollo de toda la cadena de valor del hidrógeno desde Oriente Medio hasta Europa y el Norte de África o en la opción de que la empresa se centre en generar demanda e infraestructura en España y otras partes de Europa, ya que la estatal de Abu Dabi sigue centrado en la producción de hidrógeno.
“En realidad, estamos hablando exactamente sobre eso con Adnoc en este momento”, dijo Wetselaar, añadiendo que el mayor valor añadido que puede ofrecer Cepsa es el acceso al mercado. “Tenemos clientes en España, podemos desarrollar clientes en el resto de Europa”, añadió al respecto.
No obstante, el consejero delegado de Cepsa consideró que todavía es “un poco pronto” para decir cómo se formará la posible alianza con Adnoc.
Wetselaar destacó el potencial de España para convertirse en el principal foco de hidrógeno en Europa, debido a su ideal ubicación para erigirse también en el puerto de entrada para las importaciones de hidrógeno desde el Norte de África y Oriente Medio.
“Por supuesto, nuestra relación con Masdar, con Adnoc y Mubadala nos brinda una muy buena oportunidad de ser la empresa que recibe el flujo de hidrógeno que proviene de Abu Dabi”, apuntó.
OPORTUNIDADES EN RENOVABLES CON MASDAR.
Asimismo, Cepsa ha tenido acercamiento con varias empresas, entre las que figura Masdar, también participada por Mubadala, para explorar opciones de coinversión para el desarrollo de su cartera de renovables.
“Masdar es absolutamente un socio potencial en algunos o todos los parques. Eventualmente, solo estamos interesados en obtener electrones verdes lo más barato posible”, dijo el directivo al diario.
De todas maneras, Wetselaar aseguró que todavía no se ha hecho ninguna inversión y en “este momento es una discusión sobre en qué términos haríamos una inversión conjunta, si lo hiciéramos”.
En 2020, Cepsa ya firmó un acuerdo con Masdar para crear una empresa conjunta (‘joint venture’) para desarrollar proyectos de energías renovables en España y Portugal, con un objetivo inicial de entre 500 y 600 megavatios (MW).
HASTA 8.000 MILLONES DE INVERSIÓN EN ESTA DÉCADA
La ‘hoja de ruta’ de Cepsa para abordar la transformación de la compañía prevé unas inversiones de entre 7.000 y 8.000 millones de euros hasta 2030, de las cuales un 60% se destinará a negocios sostenibles a partir de 2023. Todo ello, se traducirá en una mayor contribución de los negocios sostenibles al resultado bruto de explotación (Ebitda) del grupo, pasando del 14% en 2022 a más de la mitad en 2030.
En hidrógeno verde, la energética aspira a convertirse en líder en esta tecnología en España y Portugal, con una capacidad de producción equivalente de dos gigavatios (GW) al final de la década.
Dentro de esta estrategia, transformará sus refinerías en Energy Parks, que confía que se conviertan en la puerta de Europa para la exportación de hidrógeno verde.
En lo que respecta a las renovables, desarrollará una cartera de proyectos de energías renovables, solar y eólica, con una capacidad de siete GW, para consumo propio, de los que 1,5 GW ya tienen conexión a la red.