Una encuesta asegura que los propietarios son más felices que los inquilinos
MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
Un 44,5% de los españoles manifiesta actualmente su deseo de cambiar de vivienda durante los próximos cinco años, un porcentaje que se reduce al 23,6% si solo se consideran las personas que quieren cambiar de casa en los dos próximos años.
Así se desprende de un estudio de Aedas Homes realizado a partir de entrevistas a cerca de 4.000 personas, incluyendo preguntas sobre indicadores como la felicidad, la digitalización y la sostenibilidad para medir su impacto en la decisión de compra de una casa.
En el segmento de población de entre 25 y 35 años, este mismo porcentaje aumenta al 35,6% durante los próximos dos años. El principal motivo entre los jóvenes es la búsqueda de una primera casa con su pareja.
En el caso del resto de edades, el objetivo para las personas de 36 a 50 años es mudarse a una vivienda más grande y nueva y, entre los 51 y 65 años, cambiar de barrio.
“En números absolutos, estamos hablando de que más de 6 millones de personas desean cambiar de vivienda antes de dos años en España. De estos, casi 2 millones son jóvenes, cerca de 3 millones personas de 36 a 50 años y 1,6 millones tienen entre 51 y 65 años”, especifica el director de Data y Transformación Digital de Aedas Homes, Jorge Valero.
El deseo de cambio de casa viene motivado por la búsqueda, principalmente, de una ubicación tranquila y espacios exteriores, como una terraza o jardín, ya que cerca del 26% de los que quieren cambiar de casa viven ahora en el centro de las ciudades.
Por comunidades, la mayor intención de cambio de casa se observa entre los canarios, andaluces y madrileños. Un 34%, 27% y 25%, respectivamente, de los entrevistados en estas tres regiones baraja esta posibilidad antes de dos años. Por el contrario, el menor deseo de mudarse se observa entre los riojanos (17%), vascos (19%) y gallegos (20%).
LOS INQUILINOS, MENOS FELICES
Asimismo, el nivel de felicidad de los jóvenes en el hogar se sitúa en el 7,1, por debajo de la media del 7,3 y del 7,5 de felicidad que aseguran tener las personas de 51 a 65 años.
“La felicidad en el hogar varía también según la tenencia y la eficiencia energética de la casa. Los propietarios son los más felices, al igual que quienes viven una casa más sostenible”, remarca Valero. Así, quienes poseen una vivienda gozan de un nivel de felicidad del 7,5, superior a quienes comparten una casa (7,2) o los que viven de alquiler (7,1).
Por regiones, los más felices con su casa son los castellanomanchegos y gallegos (7,5) y navarros, aragoneses, murcianos, extremeños y andaluces (7,4). Por el contrario, el menor nivel de felicidad lo ostentan los madrileños, vascos y canarios (7,1), principalmente por la peor opinión sobre las calidades de sus casas.