La vicepresidenta de Asuntos Económicos del Gobierno, Nadia Calviño, ha afirmado este lunes que el trabajo con la Comisión Europea para que dé su visto bueno al proyecto estratégico para impulsar el vehículo eléctrico en España está “bien encauzado” y, por tanto, será posible lanzar sus “principales elementos” antes de que finalice el año.
“El trabajo de los equipos, sobre todo del Ministerio de Industria, con la Comisión Europea ha sido muy intenso y fructífero y tengo la impresión de que el tema está bien encauzado, de forma que podamos cumplir nuestro objetivo de lanzar los principales elementos de este Perte estratégico para nuestro país antes de final de año, tal y como habíamos previsto”, ha asegurado en declaraciones a la prensa.
Calviño ha aprovechado su visita a la capital comunitaria para reunirse antes del Eurogrupo con la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario responsable de Competencia, Margrethe Vestager, con quien ha abordado “en particular el proceso de autorización de las ayudas públicas” correspondientes al Programa de Apoyo a Proyectos Estratégicos para la Recuperación y la Transformación Económica (Perte) del Vehículo Eléctrico y Conectado.
La vicepresidenta económica ha destacado que los equipos del Gobierno y de la Comisión han trabajado “desde hace semanas y meses” de forma “intensa y constructiva” sobre este asunto. “Mi impresión es que el asunto está bien encauzado”, ha insistido Calviño, para después mostrar su confianza en que se pueda lanzar el programa todavía en 2021.
De hecho, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, también tiene previsto reunirse con la vicepresidenta danesa del Ejecutivo comunitario este mismo miércoles, así como con el vicepresidente económico de la Comisión, Valdis Dombrovskis.
El Consejo de Ministros aprobó en julio el Perte del vehículo eléctrico y conectado, que supondrá “una gigantesca inversión de recursos públicos” de 4.250 millones de euros y podrá generar unos 140.000 empleos.
Moncloa calcula que tenga una “efecto multiplicador” en el sector privado de unos 19.700 millones para 2023, por lo que la inversión total ascendería a casi 24.000 millones. Concebida como una iniciativa integral sobre la cadena de valor industrial del vehículo eléctrico, el objetivo es crear un ecosistema necesario para que se pueda desarrollar y fabricar en España en todas sus fases.