La Comisión Europea ha prorrogado este martes la relajación de los controles de la Política Agrícola Común (PAC) a todo 2021 debido a que los países de la UE todavía siguen aplicando restricciones a la movilidad para contener la pandemia de coronavirus, ha informado en un comunicado.
La flexibilización de los controles permite, por ejemplo, sustituir las visitas en persona a las explotaciones por el uso de “fuentes alternativas de datos” a través de nuevas tecnologías como imágenes por satélite o imágenes geocodificadas.
“Esto garantizará que se realizan controles fiables y al mismo tiempo se respetan las restricciones de movilidad y minimizando el contacto físico entre productores e inspectores”, ha explicado el Ejecutivo comunitario.
Además, la relajación de las normas permite a los Estados miembros posponer los controles hasta que ya no haya restricciones a la libertad de movimientos y reducir el número de inspecciones ‘in situ’ relacionadas con medidas sobre la superficie y los animales, las inversiones en desarrollo rural y las medidas de mercado.
El objetivo de Bruselas con esta flexibilización es disminuir la carga administrativa de las agencias nacionales que se encargan de supervisar y aprobar los pagos de la PAC mediante una adaptación a las circunstancias actuales pero manteniendo los controles “necesarios” para el despliegue de la política agrícola europea.