BRUSELAS, 20 (EUROPA PRESS)
La Comisión Europea ha propuesto este miércoles medidas para flexibilizar la “complejidad normativa” y para incentivar inversiones públicas y privadas en biotecnología y biofabricación, con el objetivo de impulsar este campo en la Unión Europea y aprovecharlo para modernizar otros sectores como el agrícola, el forestal, el energético o el alimentario.
“Queremos crear el entorno adecuado para que este sector crezca y ofrezca soluciones globales a los problemas sociales y medioambientales”, ha dicho la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario encargada de Competencia, la liberal Margrethe Vestager.
La política danesa también ha destacado que “toda Europa se enfrenta a los mismo retos”, desde el cambio climático hasta la escasez de recursos, y que la biotecnología “puede contribuir a resolver” estos problemas, además de potenciar la “competitividad” europea.
Por ello, Bruselas presenta una comunicación que, bajo la premisa de “Construir el futuro con la naturaleza”, apunta posibles medidas que desarrollar para apostar por la investigación y la transferencia de tecnología al mercado, corregir la complejidad normativa, facilitar el acceso a la financiación y abordar otros retos como las barreras para la cadena de valor, la propiedad intelectual o la aceptación pública y la seguridad económica.
En este contexto, los servicios comunitarios han puesto en marcha un estudio para investigar la posición de la UE en comparación con otros líderes mundiales en la generación emergente de biotecnología y la transferencia a la industria de biofabricación.
También quieren estimular la demanda del mercado apoyándose, por ejemplo, en que los productos generados con biotecnología tienen un menor impacto medioambiental que los petroquímicos. Otra idea es llevar a cabo una evaluación de impacto exhaustiva de la viabilidad de los requisitos de contenido de origen biológico en categorías de productos específicas y en la contratación pública.
Además, desde la Comisión plantean “racionalizar” la legislación comunitaria y flexibilizar su aplicación para reducir el riesgo de fragmentación, así como “explorar una posible simplificación” y acortar los plazos de comercialización de las innovaciones biotecnológicas.
En el plano de las inversiones, Bruselas recuerda que existen ya importantes instrumentos europeos al alcance de esta industria, como el programa ‘Horizonte Europa’, el Fondo de Innovación o la Plataforma de Tecnologías Estratégicas para Europa (STEP).
La Comisión también trabajará para crear un centro biotecnológico de la UE, una herramienta operativa para que las empresas biotecnológicas naveguen por el marco regulador e identifiquen el apoyo para expandirse, de aquí a finales de 2024.