Durante el segundo día de la cumbre de los BRICS, el presidente ruso y anfitrión del evento, Vladímir Putin, está llevando a cabo una serie de reuniones bilaterales con líderes clave, incluyendo el presidente iraní, Masoud Pezeshkian, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y el primer ministro etíope, Abiy Ahmed Ali, cuyo país se unió formalmente el 1 de enero de este año. El presidente venezolano, Nicolás Maduro, también ha llegado ya a la ciudad rusa de Kazán para participar en la cumbre.
En su discurso de apertura, Putin destacó la necesidad de reconocer el creciente interés de los países del Sur y del Este en fortalecer sus vínculos con los BRICS. Propuso incluir en la declaración final de la cumbre una lista de países socios de los BRICS y categorizar su estado de socios. Además, subrayó la importancia de mantener la eficacia del grupo y anticipó que se abordarían “conflictos regionales”, es decir, Oriente Medio y Ucrania.
Putin criticó la implementación de la Agenda de Desarrollo Sostenible de la ONU, calificándola de “estancada”. Refiriéndose a los problemas del comercio mundial y el aumento de la inflación, Putin expresó la iniciativa de crear una “bolsa de granos” para los BRICS, con el fin de proteger los mercados nacionales de interferencias externas y de “los intentos de crear escasez artificial de alimentos”.
Por su parte, el presidente chino, Xi Jinping, también ha participado en la cumbre abogando por una construcción “justa” y “pacífica” de los BRICS, aunque no comentó públicamente sobre la guerra en Ucrania, un tema que trató en privado con Putin.
China y Brasil han intentado en las Naciones Unidas conseguir el apoyo de los países para una tregua. Pero por otro lado, Ucrania ha argumentado que Pekín y Brasilia están siguiendo las órdenes de Moscú.
Sobre el tema del nuevo sistema financiero de los BRICS, varios de los líderes expresaron su deseo de que la estructura económica se fortalezca. Como dijo Xi, “existe una necesidad urgente de reformar la arquitectura financiera internacional” y remarcando que los BRICS “deben desempeñar un papel destacado” en este cambio.
Por otro lado, Putin afirmó que “el dólar realmente está siendo utilizado como un arma, esto es un gran error”, añadiendo que esto socava la confianza en esta moneda. “Rusia no abandona el dólar, pero se ve obligado a buscar alternativas”, dijo. En el mismo contexto, el presidente egipcio, Abdel Fattah Sisi, manifestó la disposición de Egipto para aumentar los pagos en monedas nacionales.
La cumbre de los BRICS se lleva a cabo mientras los jefes financieros mundiales se reúnen en Washington en el contexto de los dos conflictos, en una economía china en decadencia y preocupaciones de que las elecciones presidenciales estadounidenses puedan encender nuevas batallas comerciales.
“Estamos luchando por un nuevo orden mundial, más seguro y más justo. El período del unilateralismo está llegando a su fin (…) Los estadounidense han contribuido al crecimiento de los conflictos y las guerras en todo el mundo”, dijo el presidente iraní, ante la expectativa que se tomen decisiones más rápidas y serias ante el crecimiento de los BRICS.