O GROVE (PONTEVEDRA), 1 (EUROPA PRESS)
El consejero delegado de Abanca, Francisco Botas Ratera, ha destacado este sábado la importancia de desarrollar un mercado único para las instituciones financieras europeas que evite “regulaciones distintas” e “impuestos diferentes”.
Así lo ha señalado Botas durante su intervención en el Foro La Toja, llevado a cabo en la localidad pontevedresa de O Grove. Allí, ha participado en una mesa redonda enfocada en el futuro de la globalización, en la que también han estado presentes el presidente ejecutivo de Iberia, Javier Sánchez Prieto, y la directora general de Meta España y Portugal, Irene Cano.
El directivo de Abanca ha explicado que la banca minorista, la que está “pegada a los clientes”, no dispone de un mercado único europeo, por lo que se enfrenta a “regulaciones distintas” e “impuestos diferentes”, además de a la ausencia de un mercado de garantía de depósitos.
Ha puesto el ejemplo de Abanca y la operación transfronteriza que ha llevado a cabo en el mercado Ibérico, cuando se encontró con diferentes regulaciones y “supervisiones no perfectamente alineadas”, entre otros problemas, por no disponer de un mercado único europeo.
Botas Ratera ha puesto el foco en la importancia de impulsar una regulación “orientada a la competitividad” y ha lamentado las “asimetrías regulatorias” que existen en Europa, lo cual influye, según ha dicho, en los flujos económicos.
“En Europa somos observadores de nuestra gran capacidad de desarrollo regulador. Tenemos políticas bastante acertadas, pero cuando las bajamos a la regulación no dejamos de complicarnos”, ha añadido Botas este sábado en La Toja.
INNOVACIÓN
Además, esto incide negativamente en los costes incrementales de algunos sectores y en la innovación. “Sin duda la regulación de Europa es tremendamente positiva en ámbitos de derechos humanos, en ámbitos digitales, en protección de datos… Pero no puede ser que el 92% de los datos europeos estén ubicados en Estados Unidos, siendo un aliado. Algo está pasando en la innovación local”, ha lamentado.
“No podemos ser una isla regulatoria. ¿Qué creo que debería hacerse? Profundizar en las políticas, pero exigir que la regulación esté orientada a la competitividad de Europa y las empresas en un mundo globalizado”, ha reivindicado.
En este sentido, ha hablado de la globalización y de las distintas velocidades que se están dando en el ámbito de la descarbonización a nivel mundial, poniendo el foco en que reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) “tiene un coste”.
Pese a que ha subrayado que la descarbonización “es necesaria” y que las políticas en este aspecto “son acertadas”, para él es importante gestionar los tiempos y llevar a cabo una descarbonización teniendo en cuenta los distintos sectores económicos y lo que supone para cada uno de ellos.
Botas ha cerrado su intervención con un mensaje optimista, destacando la necesidad de gestionar el corto plazo con la “incertidumbre actual”, pero sabiendo que “pronto” habrá un momento de cambio en la situación económica que genere mejores previsiones, lo cual generará oportunidades.