MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
Bosch prevé invertir 3.000 millones de euros adicionales en el negocio de los semiconductores hasta 2026 como parte de su programa de financiación sobre microelectrónica y tecnología de las comunicaciones, según ha informado en un comunicado.
“La microelectrónica es el futuro y es vital para el éxito de todas las áreas de negocio de Bosch”, ha destacado el presidente del consejo de administración de Bosch, Stefan Hartung, en el Bosch Tech Day 2022 en Dresde.
Uno de los proyectos que el grupo planea financiar con esta inversión es la construcción de dos nuevos centros de desarrollo, en Reutlingen y Dresde (Alemania), con un coste conjunto de más de 170 millones de euros. Además, la empresa invertirá 250 millones de euros durante el próximo año en la creación de 3.000 metros cuadrados adicionales de espacio de sala limpia en su fábrica de obleas en Dresde.
En este marco, Hartung ha indicado que la compañía se prepara para un crecimiento constante en la demanda de semiconductores. “Para nosotros, estos componentes en miniatura significan un gran negocio”, ha apostillado.
FOMENTO DE LA MICROELECTRÓNICA EN EUROPA
En el marco de la Ley Europea de Chips, la Unión Europea y el gobierno federal alemán están proporcionando fondos adicionales para desarrollar un ecosistema sólido para la industria microelectrónica europea.
El objetivo es duplicar la cuota europea en la producción mundial de semiconductores, para que pase del 10% al 20% hasta finales de la década.
Hartung ha explicado que “más que nunca, el objetivo debe ser producir chips para las necesidades específicas de la industria europea”, algo que no solo significa chips en el extremo inferior de la nanoescala. Por ejemplo, los componentes electrónicos utilizados en la industria de la electromovilidad requieren tamaños de proceso de entre 40 y 200 nanómetros, medidas para las que “exactamente” están diseñadas las fábricas de obleas de Bosch.
Asimismo, la nueva inversión en microelectrónica abre nuevas áreas de innovación para Bosch. Los nuevos campos de innovación en la compañía incluyen sistemas en un chip, como los sensores de radar que utilizan los vehículos para la monitorización de 360 grados a su alrededor cuando circula de manera automatizada. Ahora, Bosch busca mejorar dichos componentes, haciéndolos más pequeños, más inteligentes y también más baratos de producir.
La compañía está trabajando también para modificar aún más sus propios sistemas microelectromecánicos (MEMS), específicamente para la industria de bienes de consumo. Una de las cosas que los investigadores de la compañía están utilizando actualmente para desarrollar esta tecnología es un nuevo módulo de proyección, que es tan pequeño que se puede integrar en la patilla de unas gafas inteligentes.
Otro enfoque de Bosch es la producción de nuevos tipos de semiconductores. En su planta de Reutlingen, por ejemplo, Bosch ha estado produciendo en masa, desde finales de 2021, chips de carburo de silicio (SiC), utilizados en la electrónica de potencia requerida para vehículos eléctricos e híbridos, donde han ayudado a aumentar la autonomía hasta en 6%.
En los últimos años, el grupo ha realizado varias inversiones en su negocio de semiconductores. Entre ellas destaca la fábrica de obleas en Dresde, que se inauguró en junio de 2021. Con 1.000 millones de euros, es la inversión más grande en la historia de la compañía.
Asimismo, El centro de semiconductores en Reutlingen también se está ampliando, de modo que hasta 2025, la compañía invertirá alrededor de 400 millones de euros en el aumento de su capacidad productiva.