El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha pedido a China que proporcione un trato justo, igualdad de condiciones para las empresas estadounidenses que trabajan en China que para las nativas. Así lo ha expresado en su visita al gigante asiático, en un intento de mejorar las relaciones entre ambos países, especialmente en lo comercial. Se trata de un viaje delicado, con contactos de alto nivel y grupos de trabajo, tanto sobre comercio global como sobre comunicación militar. En este caso, Washington ha mostrado en reiteradas ocasiones su malestar sobre la actuación de China, saturando el mercado con su enorme capacidad de fabricación. Además, las relaciones se han visto tensionadas por la postura china respecto a la guerra en Ucrania, postulándose al lado de Rusia.