Estima que el déficit se reducirá en 2024 hasta el 3,7% del PIB, siete décimas por encima respecto a las estimaciones del Gobierno
MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
BFF Banking Group ha señalado que la condonación general e incondicional de una parte de la deuda de las comunidades de régimen común mejoraría su solvencia y capacidad de volver a los mercados, aunque ha advertido de que esto “contribuirá a agravar los problemas de indisciplina fiscal que ya padecen”.
El acuerdo de investidura del PSOE con ERC recoge la tramitación de una modificación legal de alcance general a todas las CC.AA. que permite la asunción por el Estado de parte de la deuda autonómica con este, originada por el impacto negativo del ciclo económico.
En el caso de Cataluña, se estima que el impacto del ciclo equivale al 20% de su deuda en los fondos estatales de provisión de liquidez (FFCA) y representará unos 15.000 millones de euros de la deuda de esta región.
BFF Banking Group ha alertado en su informe sobre perspectivas macro y financieras para España de que esto agravará los serios problemas de incentivos que ya sufre el sistema de financiación de régimen común.
“A la vista de la experiencia previa, cualquier quita no sujeta a condiciones estrictas de ajuste, tenderá a confirmar la percepción que ya tienen las CC.AA. de que pueden gastar sistemáticamente más de lo que ingresan porque al final el Estado las rescatará de una forma u otra sin coste alguno para ellas”, ha advertido.
En todo caso, para el banco la reforma del sistema de financiación y el establecimiento de normas de entrada y salida del FLA parecen prioritarias.
RALENTIZACIÓN DEL CRECIMIENTO DEL PIB EN 2024
BFF Bank ha apuntado que las previsiones del Banco de España prevén que el avance del Producto Interior Bruto (PIB) español se ralentice este año hasta el 1,6%, antes de volver a acelerarse levemente en el bienio 2025-2026, cuando alcanzará tasas del 1,9% y 1,7%, respectivamente.
El principal soporte de la actividad es la demanda interna, según el banco. En particular, el consumo se verá favorecido por el aumento de las rentas reales, en un contexto de moderación de las tasas de inflación.
Se prevé también que la formación bruta de capital actúe también como motor del crecimiento, debido, en gran medida, al efecto de los proyectos vinculados al programa Next Generation EU (NGEU), cuyo despliegue debería ganar tracción en 2024 y 2025.
En cuanto a la inflación, el informe apunta que ha recuperado su tendencia a la desaceleración en los últimos meses, como consecuencia del reciente descenso de los precios de los productos básicos y la prolongación de las sendas descendentes de la inflación de los alimentos y la inflación subyacente. Se espera que la inflación descienda del 3,4% en 2023 al 3,3% en 2024 y en torno al 2% en 2025 y 2026.
Pero, como en el caso del área del euro, la principal fuente de riesgo es la proveniente de los conflictos bélicos de Ucrania y la franja de Gaza. Del mismo modo, se mantiene también la incertidumbre sobre el impacto del endurecimiento de la política monetaria llevado a cabo hasta la fecha.
PREVÉ QUE EL DÉFICIT BAJE AL 3,7% EN 2024 y AL 3,5% EN 2025
En un contexto de prórroga de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) y de una parte de las medidas destinadas a paliar el aumento de los costes energéticos (cuyo coste se estima en torno a 0,2 puntos porcentuales), BFF Bank prevé que el déficit se reduciría hasta el 3,7% del PIB, siete décimas por encima respecto a las estimaciones del Gobierno.
Además, ha alertado de que sin cambios de política fiscal, y considerando como temporales las medidas energéticas, el déficit caería hasta el 3,5% del PIB en 2025, medio punto por encima de lo exigido por Bruselas.
En cuanto a la deuda pública, el estudio apunta a que, con unos tipos de interés elevados y la persistencia del desequilibrio fiscal, tan solo el crecimiento de la actividad contribuirá a la reducción de la misma. Se espera que esta caiga hasta situarse en torno al 104% del PIB a finales 2025.
“El gran reto para las finanzas públicas consiste en definir una estrategia que reduzca de manera sostenida la deuda pública y que garantice la sostenibilidad fiscal”, ha advertido el banco.
A largo plazo, se advierte de que las presiones del envejecimiento y la carga de intereses llevan a proyectar una ratio desfavorable de la deuda. Por ello, considera necesario el diseño de un plan a medio plazo que guíe las cuentas públicas hacia una situación de equilibrio