MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
El grupo químico alemán Basf espera cerrar el ejercicio 2023 con un beneficio neto de 225 millones de euros, en contraste con las pérdidas de 627 millones anotadas en sus cuentas del año anterior como consecuencia principalmente del impacto adverso de atípicos, aunque no habría cumplido sus previsiones en cuanto a los ingresos anuales y al resultado explotación antes de elementos excepcionales (Ebit).
En este sentido, la multinacional germana ha adelantado que sus ventas esperadas para todo el año 2023 ascenderán a 68.902 millones de euros, una cifra por debajo del rango de 73.000 a 76.000 millones de euros previsto por Basf y un 21% menos que los 87.327 millones ingresados en 2022.
Asimismo, la multinacional anticipa un resultado de explotación (EBIT) esperado antes de extraordinarios de 3.806 millones de euros, inferior al rango de entre 4.000 y 4.400 millones de euros previsto por la compañía, así como un 44,7% por debajo del dato del año 2022.
“La disminución en comparación con el año anterior se debe a menores márgenes relacionados con las ventas, que no pudieron compensarse con la reducción de costes fijos lograda”, ha explicado la empresa.
Por otro lado, Basf espera que los flujos de efectivo de las actividades operativas alcancen los 8.100 millones de euros en 2023 y, por tanto, superen la cifra del año anterior de 7.709 millones de euros, con un flujo de caja libre de 2.700 millones de euros, frente a los 3.333 millones del año anterior.