MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
Avangrid, filial norteamericana de Iberdrola, ha anunciado el cierre de la primera financiación para un proyecto eólico marino en Estados Unidos, Vineyard Wind 1, por 2.300 millones de dólares (unos 1.950 millones de euros).
El proyecto, de 800 megavatios (MW) de capacidad instalada, ha cerrado el préstamo para su construcción y financiación de deuda con nueve bancos globales. El cierre de la financiación incluye un acuerdo de compra venta de suministro de energía a largo plazo (PPA) y un programa de interconexión eléctrica.
Asimismo, permitirá el inicio de la construcción del parque eólico marino este mismo otoño, con el fin de que comience a suministrar electricidad limpia a Massachusetts en 2023.
Vineyard Wind 1 generará electricidad a coste competitivo para más de 400.000 hogares y empresas de la Commonwealth de Massachusetts. Creará el empleo equivalente a 3.600 años de trabajo a tiempo completo, reducirá las tarifas eléctricas en aproximadamente 1.400 millones de dólares durante los primeros 20 años de operación y evitará la emisión a la atmósfera de más de 1,6 millones de tCO2 al año.
Además de Vineyard Wind, Avangrid promueve el proyecto eólico marino Park City Wind (804 MW), que se desarrollará frente a las costas de Connecticut, y analiza proyectos en áreas frente a las costas de Massachusetts y Rhode Island. En el Atlántico medio, Avangrid está desarrollando Kitty Hawk Offshore Wind, con una capacidad instalada de 2.500 MW para producir energía limpia en Virginia y Carolina del Norte.
AVANGRID EMITE BONOS “VERDES” POR 640 MILLONES DE DÓLARES
Por otro lado, varias sociedades operativas dependientes de Avangrid han cerrado recientemente la colocación de unas series de bonos, por valor conjunto de 640 millones de dólares (543 millones de euros), con los que refuerza el compromiso del grupo Iberdrola con la financiación verde.
Los bonos han sido colocados en el mercado privado de deuda americana por cuatro sociedades del grupo Avangrid y el 43% de sus fondos se destinarán al crecimiento, a través de nuevas inversiones en renovables y el despliegue de redes. La compañía prevé inversiones orgánicas de 20.000 millones de dólares (unos 17.000 millones de euros) hasta 2025. El resto de los fondos se dedicará a refinanciar deuda.
El coste medio ponderado ha sido el 2,27%, tras registrar una demanda que ha multiplicado por casi tres veces la oferta. La demanda conjunta de la transacción ha ascendido a 1.981 millones de dólares (1.682 millones de euros), poniendo de manifiesto la confianza de los inversores en la solvencia del grupo energético.
La disposición de los fondos se ha acordado entre el 15 de diciembre de este año y el 31 de enero de 2022.