El 83% de su resultado operativo procede de Abertis, compañía en la que ACS ya ostenta casi el 50% del capital
MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
Las acciones de la italiana Atlantia se impulsaban más de un 10% desde la apertura de la Bolsa este jueves, después de que ACS confirmase que está estudiando hacerse con buena parte de sus concesiones junto a los fondos GIP y Brookfield, una operación que también ha suscitado el interés de Blackstone.
Antes de que se hiciese público el interés de la firma española que preside Florentino Pérez, Atlantia tenía un valor en el mercado de 14.400 millones de euros. Ahora, tras conocerse ambas ofertas, su capitalización ha subido a 17.200 millones de euros, es decir, cerca de 3.000 millones más en solo un día.
En concreto, sus títulos se anotaban un alza del 10,2% pasadas las 11.00 horas, hasta alcanzar los 21 euros por acción, un precio que la compañía no registraba desde antes del estallido de la pandemia, hace ya más de dos años.
Este impulso en Bolsa proviene de la oferta que ACS está planeando junto con los fondos GIP y Brookfield, con los que ya ha firmado un acuerdo exclusivo para comprar la mayor parte del negocio de concesiones de autopistas de la italiana. No obstante, la propia compañía asegura que todavía no se ha tomado una decisión respecto de si presentar formalmente o no la oferta.
Por su parte, Blackstone se ha aliado con Edizione, el holding por el cual la familia Benetton controla el 33% de Atlantia, para hacer otra oferta y excluirla de Bolsa, según la información adelantada por ‘Bloomberg’.
Aunque esto pueda abrir un nuevo enfrentamiento, ACS y Atlantia ya son socios en Abertis, empresa española concesionaria de autopistas en la que la primera cuenta con el 50% menos una acción y la segunda con el otro 50% más una acción.
AUTOPISTAS ITALIANAS
ACS ya intentó el año pasado llegar a un acuerdo con Atlantia para comprarle la sociedad con la que gestionaba casi 3.000 kilómetros de autopistas italianas por un importe de entre 9.000 millones y 11.000 millones de euros.
No obstante, se trataba de una operación delicada en la que también intervenía el interés del Gobierno italiano, que es quien obligó a Atlantia a desprenderse de estas autopistas tras el derrumbe de un puente en Génova en 2018 que causó la muerte a 43 personas.
Finalmente, la sociedad fue vendida a un consorcio formado por el propio Gobierno italiano y los fondos Blackstone y Macquarie, por un máximo de 9.300 millones de euros. Fuentes financieras explican que esta venta supuso para Atlantia perder una buena parte de sus concesiones.
De hecho, su principal cartera de autopistas es la que está incluida en Abertis, que le aporta a Atlantia el 83% de su resultado bruto de explotación (Ebitda). Sus autopistas en Brasil, Chile y Polonia y sus concesiones de aeropuertos concentran el restante beneficio operativo.
En este contexto, ACS podría ganar una ventaja en cualquier posible negociación futura, al mostrar una mayor fortaleza operativa, sobre todo tras la venta a Vinci de su negocio industrial por 5.000 millones de euros, con una plusvalía cercana a los 3.000 millones de euros. Al menos, le serviría para hacerse con un paquete mayor de acciones en Abertis.
Recientemente, Florentino Pérez se refirió a Atlantia al aludir a la posibilidad de que el 20% que la española controla en Abertis por medio de su filial alemana Hochtief se traspase a la matriz para simplificar la estructura de ACS, algo que, según aseguró, se haría de mutuo acuerdo con su socio Atlantia.
Al calor de esta posible operación, los títulos de ACS repuntaban un 1,79% en Bolsa a las 11.35 horas, hasta los 23,88 euros.