MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
Asufin se ha sumado a una campaña para pedir a las autoridades financieras que desbloqueen una financiación “asequible” para la renovación energética y climática de las viviendas, según ha anunciado hoy en una nota de prensa.
En concreto, se ha sumado a la coalición Unlock, que está impulsada por la organización Positive Money Europe, en colaboración con Revo Prosperidad Sostenible, Aúna Forum y la propia Asufin.
La asociación afirma que “es poco probable” que los bancos “den ese paso por sí mismo”, por lo que insta a las autoridades políticas y financieras a que soliciten al sector el desarrollo de productos “asumibles” para los propietarios.
Explica que, actualmente, los hogares son responsables del 21% de las emisiones de carbono, lo que “obliga a tomar medidas urgentes para reducir el uso de energía” en ellos.
A esto, la asociación suma que el parque inmobiliario de Europa es “de los más antiguos” y con los cambios más lentos: más de 220 millones de edificios, el 85% del total, se construyeron antes de 2001. “Y la mayoría seguirá en pie en 2050, el año objetivo para alcanzar la neutralidad energética”, agrega.
Por otra parte, Asufin calcula que la renovación climática de los hogares haría ahorrar hasta 1.100 euros al año a sus propietarios, al tiempo que se refiere al actual contexto bélico “que recuerda la alta dependencia que existe hacia los combustibles fósiles”.
Al respecto, indica que la Comisión Europea ya está dando pasos en esta dirección con la Estrategia Oleada de Renovación, mientras que en España se han habilitado deducciones por obras de mejora de la eficiencia energética de las viviendas. “Pero no es suficiente. Actualmente existe un déficit de inversión en Europa de 275.000 millones de euros al año que los gobiernos no pueden cubrir por sí mismos”, explica la asociación.
Igualmente, asegura que invertir en la renovación de viviendas también llevaría a un “efecto dominó” en el sector de la construcción, dando un impulso al empleo. En concreto, Asufin hace mención a datos sindicales que estiman que estas inversiones podrían generar hasta 108.000 nuevos puestos de trabajo “estables y ecológicos”.