
Un alto general ruso, señalado por Ucrania como responsable del uso de armas químicas contra tropas ucranianas, fue asesinado en Moscú mediante una bomba oculta en un scooter eléctrico, informaron el martes las autoridades rusas. Reuters, citando una fuente ucraniana, apunta que Kiev estaría detrás del atentado.
El general Igor Kirillov, jefe de las Tropas de Protección Nuclear, Biológica y Química de Rusia (RKhBZ), murió junto con su asistente frente a un edificio residencial en Ryazansky Prospekt, según detalló el Comité de Investigación de Rusia en un comunicado. Rápidamente se efectuó un fuerte despliegue policial y se acordonó el área.
Las autoridades rusas informaron de que se ha iniciado una investigación formal por el asesinato de los dos militares, aunque fuentes policiales citadas por medios locales sugirieron que el caso podría clasificarse como un acto de terrorismo.
Kirillov había sido una figura prominente en los medios estatales rusos, donde acusaba a Ucrania de violar protocolos de seguridad nuclear. Las acusaciones de Kiev contra Kirillov se intensificaron el lunes, cuando fiscales ucranianos lo acusaron en ausencia del uso de armas químicas prohibidas, según informó el Kyiv Independent. Las fuerzas de protección que Kirillov dirigía fueron sancionadas por el Reino Unido en octubre, debido a informes sobre el uso del agente tóxico cloropicrina en el campo de batalla, así como por desplegar agentes antidisturbios en zonas de combate.
Aunque Ucrania no emitió comentarios inmediatos sobre el asesinato, este incidente se suma a una serie de ataques selectivos en territorio ruso desde el inicio de la invasión a gran escala en febrero de 2022. Entre los casos más notorios se encuentran el asesinato en 2022 de Darya Dugina, hija del ideólogo nacionalista Alexander Dugin, a través de un coche bomba; el atentado en 2023 contra el bloguero proguerra Vladlen Tatarsky en una cafetería de San Petersburgo; y el tiroteo de un comandante de submarino ruso acusado por Kiev de crímenes de guerra.
Las tropas de defensa radioactiva, química y biológica de Rusia, conocidas como RKhBZ y comandadas por Kirillov, tienen la misión de operar en entornos contaminados y brindar protección a las fuerzas terrestres en condiciones extremas. La muerte del general representa un golpe significativo para estas unidades, mientras Moscú enfrenta acusaciones internacionales y desafíos internos en medio del conflicto prolongado con Ucrania.
La situación ha encendido nuevamente las alarmas en Rusia sobre posibles ataques dentro de su territorio, intensificando las tensiones en un conflicto que parece lejos de resolverse.