MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
La gestora francesa Amundi espera que la Eurozona cierre este año con un avance del 5,1% y experimente un crecimiento del 4,1% en 2022, en tanto que Estados Unidos acabará 2021 con un avance del 5,7% y en 2022 crecerá un 3,3%.
Así lo han señalado este miércoles el director de inversiones del grupo Amundi, Pascal Blanqué; el director adjunto de inversiones, Vincent Mortier, y la directora global de análisis y estrategia, Monica Defend, en un encuentro con los medios.
En general, esperan un crecimiento de la economía global del 5,8% para 2021 y del 4% para 2022, aunque han explicado que este será desigual y desincronizado. El “sentimiento” pasará a ser de euforia post-pandemia a la realidad, con un primer semestre bueno y los dos trimestres posteriores con un crecimiento más suave.
Los tres analistas han explicado que se está produciendo un cambio de régimen y narrativa con el que se deja atrás el escenario de baja inflación y bajo crecimiento en el que se encontraba la economía de los países desarrollados antes de la pandemia.
Blanqué ha incidido en que la inflación estará presente con niveles más altos de una forma más permanente de la esperada en un primer momento, con lo que los inversores van a estar obligados a tenerla en cuenta para tomar sus decisiones.
No obstante, la gestora no ha dado previsiones concretas para la inflación en los próximos años. Defend ha señalado en este sentido que la incertidumbre en relación a sus previsiones es alta y habrá que esperar a finales de la primavera de 2022 para saber lo que va a pasar, pero que es un motivo de preocupación.
El director de inversiones de Amundi ha destacado que uno de los mayores desafíos para los inversores es reconfigurar la cartera para adaptarla a los actuales niveles de inflación, así como protegerla de la burbuja tecnológica, entre otros.
Los bancos centrales mantendrán los tipos de interés en los niveles actuales para mejorar el precio de la deuda que se necesita para los proyectos sociales y medioambientales. De hecho, Defend ha incidido en que para la transición verde se va a necesitar financiación y que habrá que abordar la desigualdad que ha aumentado con la pandemia.
Asimismo, ha añadido que no esperan que el ‘tapering’ de la Reserva Federal estadounidense (Fed) vaya a tener lugar en 2022, si bien el Banco de Inglaterra sí subirá sus tipos el año que viene. El Banco Central Europeo (BCE) tendrá que enfrentarse a mayores desafíos, dada la dependencia de energía del Viejo Continente, entre otros factores.
En cuanto a los mercados, Blanqué ha defendido que los bonos ya no son los diversificadores “estrella” de las carteras, con lo que los inversores deberán buscar otros activos en este sentido.
POSIBLE MEJORA DE LOS DIVIDENDOS
La gestora ha añadido que los dividendos podrían mejorar en el escenario actual, por lo que los inversores deberían buscar compañías con un historial de recompensa de sus accionistas ahora que se está saliendo de la crisis.
Así, considera que las acciones son un ‘must have’ en las carteras, pero que es necesario diversificar su riesgo. La gestora tiene una previsión neutral para las acciones estadounidenses en 2022 y positiva para las europeas, al igual que para los mercados emergentes.