MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
Adif ha adjudicado a un consorcio integrado por Lantania y ASCH las obras de la primera fase para conectar el Aeropuerto de Adolfo Suárez-Madrid Barajas con el resto de España por medio de trenes de alta velocidad, por 17,6 millones de euros y un plazo de ejecución de 17 meses, por lo que los primeros trenes podrían llegar a partir de 2024.
Según las actas de adjudicación consultadas por Europa Press, hasta 13 empresas se presentaron al concurso, entre las que se encuentran todas las grandes constructoras que cotizan en bolsa (ACS, Ferrovial, Acciona, Sacyr, FCC y OHLA), así como Comsa, Azvi, Ortiz o Copisa, entre otras.
Sin embargo, la unión entre Latania y ASCH presentó el mejor precio, con una rebaja del 18,18% respecto al presupuesto contemplado inicialmente por Adif, así como la segunda mejor oferta técnica, solo por detrás de la de Convensa, del grupo FCC.
Se trata de la primera de las fases proyectada por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para llevar la alta velocidad al principal aeropuerto de España lo antes posible, por lo que solo se actuará en 3,5 kilómetros de vías y se aprovechará la infraestructura ferroviaria que ya hay para los trenes de cercanías.
En cualquier caso, tras los 17 meses contemplados para esta obra y el tiempo adicional necesario para hacer las pruebas, los trenes podrán circular a partir de 2024 o, como tarde, en 2025, en línea con lo que anunció hace dos años el anterior ministro del ramo, José Luis Ábalos.
En concreto, el proyecto contempla la conexión de la red de alta velocidad, que tiene ancho estándar (1.435 milímetros), con la terminal 4 de Barajas, una actuación compatible con el mantenimiento de los servicios de Cercanías existentes, que circulan en ancho convencional (1.668 milímetros).
Con esta obra, los trenes de alta velocidad podrán cubrir la distancia entre la estación de Madrid Chamartín-Clara Campoamor y el aeropuerto en poco más de diez minutos, evitando transbordos. Además, gracias al túnel de alta velocidad que se estrenó el año pasado entre Atocha-Almudena Grandes y Chamartín, cualquier servicio procedente de cualquier punto de España podría llegar al aeropuerto directamente.
A esta primera fase, que limitará el número de circulaciones diarias, le seguirá otra más completa pero que todavía está en estudio informativo y saldrá a información pública en los próximos meses o a lo largo de 2023.