MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
Turner, filial estadounidense de ACS, se ha adjudicado un contrato en joint venture con Yates para levantar una fábrica de baterías de vehículos eléctricos en Kansas (Estados Unidos), que cuenta con una inversión asociada de 4.000 millones de dólares (3.770 millones de euros).
Se trata de una planta que comenzará a funcionar en marzo de 2025 y alcanzará una producción anual de 30 gigavatios hora (GWh), con la que Panasonic busca seguir reduciendo su huella de carbono, con el objetivo de ser prácticamente neutra de emisiones para 2030 y evitar un total de 300 millones de toneladas de CO2 para 2025.
El grupo presidido por Florentino Pérez, a través de su red de filiales distribuidas por todo el mundo, ya se ha hecho con varios contratos similares de baterías tanto en Estados Unidos como en Australia.
En concreto, Turner construirá también una fábrica de baterías en Ohio para una ‘joint venture’ formada por Honda y LG Energy Solution, con un presupuesto estimado 3.400 millones de euros, así como una planta de materiales para baterías de vehículos eléctricos para Ascend Elements en Kentucky por 950 millones.
En Australia, su filial Cimic ha sido elegida para instalar la infraestructura de alto voltaje que conectará un sistema de almacenamiento de energía de batería suministrado por Tesla en el ‘Western Downs Green Power Hub’ de Neoen.
“Estamos encantados de formar parte del equipo que entregará esta planta para apoyar el objetivo de Panasonic de satisfacer la creciente demanda de baterías de alta calidad de sus socios de la industria del automóvil. Compartimos el objetivo común de mejorar el desempeño ambiental y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y el consumo de agua”, ha señalado el vicepresidente de Turner, Jim Brownrigg.