SANTIAGO DE COMPOSTELA, 18 (EUROPA PRESS)
Abanca ha iniciado este jueves las negociaciones con los sindicatos para realizar un ajuste de plantilla que afectará a unos 350 trabajadores por la integración de Bankoa y Novo Banco.
Según fuentes de los sindicatos consultadas por Europa Press, la entidad alega causas “organizativas y de producción” y sitúa el total de empleados afectados en 370.
Apunta a “solapamientos en 15 provincias” a mayores de los servicios centrales, que en el caso de Bankoa están en San Sebastián. De este modo, el proceso afectará también a las cuatro provincias gallegas, según resaltan las organizaciones sindicales.
El representante de la CIG en la reunión, Alberto Carballo, expone el rechazo de su central al planteamiento de la empresa ya que, en la práctica, dice, supone “deshacerse” de un volumen de plantilla equivalente a casi “la totalidad” de la que aportan los bancos cuyo negocio “asume” la entidad gallega. Bankoa cuenta con algo menos de 260 trabajadores y Novo Banco con unos 157.
También critica las condiciones expuestas, ya que, aunque Abanca habla de “voluntariedad”, eso “es relativo”, advierte, y asegura que acabará habiendo despidos indemnizados, recolocaciones y desplazamientos.
En cuanto a la edad, según indica, el banco plantea las salidas para mayores de 58 años, pero da por hecho que si no se cubre el cupo “tendrá que tomar medidas traumáticas”. Por último, la CIG señala que la dirección trasladó la intención de homologar condiciones y horarios.
UNA DOCENA DE OFICINAS
La próxima reunión está convocada para el miércoles 24 y los sindicatos esperan entonces abordar la afectación de oficinas, que ronda a una docena, en entornos urbanos.
UGT y CC.OO. tienen mayoría y en el encuentro de este miércoles, que ha sido el primero dentro de un periodo de conversaciones informal que llegará al 31 de noviembre –luego habrá un plazo de otros 15 días para cerrar el acuerdo–, abogaron por dar voz, pero no voto, al sindicato LAB, que tiene el 100% de la representación sindical de los servicios centrales de Bankoa. Por su parte, Abanca “quiere trasladar la negociación a Madrid”, según asegura la CIG.