“En Siria estamos asistiendo a un intercambio de líderes: colocarán alguien próximo a EEUU”. Alonso
Aboud Onji, analista geopolítico, señala que, desde su perspectiva, la situación en Siria no puede considerarse una “transición democrática”, sino más bien una entrega del poder dentro de un contexto geopolítico, donde el régimen de Al Assad fue obligado a ceder. Destaca que este régimen ha estado en el poder durante más de 50 años, y aunque no es un gobierno democrático, su salida se da bajo presiones internacionales. Además, expresa su preocupación por la falta de inclusividad en el nuevo gabinete sirio, al estar dominado por los Hermanos Musulmanes y sin representación de otras facciones, como los cristianos.
Antonio Alonso, profesor de relaciones internacionales de la Universidad CEU San Pablo, mantiene que el nuevo liderazgo sirio, vinculado a grupos como los Hermanos Musulmanes, no puede considerarse una mejora democrática, sino más bien un cambio de poder entre facciones que sirven a intereses externos, como Turquía o Estados Unidos.
Ezequiel Bistoletti, doctor en ciencia política y profesor de relaciones internacionales en Alemania, subraya que la situación en Oriente Medio, particularmente en Siria, está profundamente marcada por la reconfiguración del sistema internacional.