El precio del petróleo registra este martes caídas de hasta el 5% tras las noticias que apuntan a que Israel no tendría intención de atacar la infraestructura petrolera iraní y de los datos del último informe de la Agencia Internacional de la Energía, que señala la desaceleración de China y el recorte de las previsiones de petróleo realizadas por la OPEP.
El West Texas Intermediate cayó un 5,04%, cotizando a 70,13 dólares por barril a media mañana en Europa. El precio del barril de Brent ha caído también cerca del 4,85% y se vendió a 73,72 dólares.
El Washington Post publicó un informe que revelaba que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, había dicho a Estados Unidos que estaba dispuesto a atacar objetivos militares y no instalaciones nucleares o petroleras.
Esta supuesta afirmación alivia las preocupaciones sobre una interrupción importante del crudo mundial. Justamente esta posibilidad había disparado los precios del petróleo hasta cerca de los 80 dólares en semanas anteriores.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, advirtió a Israel de que no ataque las instalaciones nucleares o petroleras iraníes para evitar una escalada regional y por el temor a que un conflicto de esta magnitud afecte a los precios de la energía en todo el mundo y repercuta en las próximas elecciones estadounidenses.
La AIE recorta la provisión de demanda de petróleo ante la desaceleración china
Por otro lado, la Agencia Internacional de Energía (AIE) redujo su pronóstico de crecimiento de la demanda mundial de petróleo para 2024 a 82,8 millones de barriles por día (180.000 menos de la cifra prevista antes), y para 2025 a 83,4 millones de barriles por día (210.000 menos), informó la agencia este martes en su último informe de octubre.
En el documento, la AIE citó el debilitamiento de la demanda en China como un factor clave de la desaceleración, representando alrededor del 20% de las ganancias globales en este año, en comparación con casi el 70% en 2023.
“A medida que se desarrolle la situación de la oferta, la AIE está preparada para actuar si es necesario. Como ha demostrado en 2022, la Agencia y sus países miembros pueden adoptar rápidamente medidas colectivas. Las reservas públicas de la AIE por sí solas superan los 1200 millones de barriles, a los que se suman otros 500 millones de barriles en existencias en virtud de obligaciones de la industria”, añade el informe.
El informe agrega que la demanda crecerá, pero no tanto como se esperaba antes de la vaga presentación del estímulo fiscal de China y de la supuesta decisión de la represalia de Israel a Irán.