JP Morgan ha inaugurado la temporada de resultados de los grandes bancos de EE.UU. UU. con unas cuentas del tercer trimestre que han superado las expectativas del mercado, impulsadas principalmente por los ingresos por intereses.
El holding financiero ha reportado un beneficio neto de 12.898 millones de dólares, lo que representa una caída del 2 % en comparación con los 13.151 millones del mismo periodo del año anterior. Esto se traduce en un beneficio por acción (BPA) de 4,37 dólares, ligeramente superior a los 4,33 dólares por acción obtenidos en 2023 y por encima de los 4,01 dólares por título que preveía el consenso del mercado.
En cuanto a los ingresos, la entidad ha alcanzado los 42.654 millones de dólares, un aumento del 7 % respecto a los 39.874 millones del tercer trimestre del año anterior, superando también los 41.630 millones de dólares que esperaban los analistas.
El mayor banco de Estados Unidos ha publicado también que sus ingresos netos por intereses han aumentado un 3% hasta los 23.500 millones de dólares, superando la previsión de 22.730 millones previstos, gracias en gran parte al crecimiento de los créditos en su división de tarjetas de crédito.
La mayor parte de los ingresos de la entidad provino de su negocio en Estados Unidos, que contribuyó con 123.230 millones de dólares, un aumento notable frente a los 96.730 millones registrados el año anterior. Estos resultados reflejan el sólido rendimiento de JP Morgan Chase.