“Rusia escala el lenguaje de la guerra ante la amenaza de ataques de Ucrania a Crimea”. Viñals
“Tanto EEUU como China se juegan mucho en la relación bilateral entre ambas” El paso de EEUU de visitar China ha sido un paso importante y la recepción ha sido fría: se ha dicho claramente que EEUU y China pasan por su nivel más bajo en las relaciones desde los años ’70. Así lo afirma José María Viñals, que explica los asuntos con los que ha lidiado el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, durante su viaje a Pekín, entre otros, la tensión en torno a Taiwán, la pugna tecnológica a nivel militar y empresarial y el escenario de potenciales acciones ante empresas chinas por parte de Estados Unidos y Europa.
Lo que está claro, según Viñals, es que China necesita a Estados Unidos, necesita a Occidente, necesita a Europa, que son sus grandes mercados. Por lo que China tiene ganas de normalizar esas relaciones comerciales y el flujo de exportaciones que se ha visto mermado por el covid y anteriormente por esa rivalidad, esa guerra comercial entre EEUU y China. El interés, de hecho, por llevarse bien ambas potencias, es mutuo.
En cuanto a las declaraciones de Biden llamando a Xi Jinping “dictador”, Viñals afirma que las relaciones Biden-Xi Jinping no han sido muy positivas. Además, añade que “no es la primera vez que Biden nos sorprende con declaraciones que a lo mejor suenan mucho peor de lo que hubiera querido inicialmente”. Es cierto también que California, donde se dieron las declaraciones, es especialmente sensible a lo que está ocurriendo en el escenario Asia-Pacífico. Habrá que ver lo que dice el presidente Biden cuando llegue a Washington y qué pasará cuando el homólogo de Blinken aterrice en Washington en la visita de vuelta de China a EEUU y qué impacto tienen estas declaraciones.
Con respecto a la escalada del conflicto de Ucrania, vemos con Viñals cómo Rusia está recrudeciendo el mensaje en torno a la guerra al ver cómo Ucrania puede utilizar misiles suministrados por EEUU o Reino Unido para favorecer posibles ataques a Crimea que, a ojos de Rusia, está fuera de la “operación especial”. La OTAN y Europa juegan también su papel aunque la alianza ha dejado claro que la entrada de Ucrania en la misma no es inminente, pero prevén que la guerra será a largo plazo. La adhesión de Ucrania a la Unión Europea sí está siendo ya valorada más de cerca, sin embargo. Una invitación formal a la OTAN para Ucrania sería vista por Rusia como una injerencia clarísima por parte de la alianza. La situación no está para echar más leña al fuego. Se debe evitar el siguiente paso del conflicto a una fase que no es buena para ninguna de las dos partes.