Claves del día: O diplomacia o fuerza. Biden fracasa en Israel y Rusia aprovecha el momento
El fracaso de Biden en su viaje a Oriente Medio se ha revelado como un desastre, al menos desde el punto de vista diplomático: el único logro del presidente de los Estados Unidos en su visita a Israel ha sido la apertura parcial de una entrada de ayuda humanitaria a Gaza por parte de un Israel que cedía ligeramente a la presión de EEUU. Sin embargo, las cancelaciones de cualquier reunión más allá de la relación con el primer ministro Netanyahu ponen de manifiesto el desastre con un viaje que no ha logrado calmar las tensiones con Irán ni con los vecinos de Israel y Palestina mientras la tensión continúa siendo máxima y parece que Biden no vino a rebajarla, teniendo en cuenta sus acusaciones ambiguas sobre los ataques al hospital Al Ahli en Gaza. Por su parte, Irán toma el pulso a Oriente Medio para ver dónde están sus aliados, mirando especialmente a Arabia Saudí, y EEUU aumenta sus sanciones en un momento en que parece que Israel estaría dispuesto a pasar las líneas rojas de Jordania e Irán el territorio de Gaza, y Cisjordania. Mientras Rusia, en cierta forma, aprovecha la ‘distracción’ de Occidente para escalar la guerra de Ucrania en el Mar Negro con cazas vigilado la zona.
Mientras, en el mercado del petróleo, EEUU realiza también un llamativo movimiento hacia Venezuela, con una rebaja de sanciones ante la que parece ahora su mejor baza para paliar los efectos que la caída de sus reservas de crudo puede tener en el mercado norteamericano. Un dictador que ahora, ante los “malos malísimos” Rusia e Irán, parece no ser ya tan malo como antaño.
En medio de este contexto, vemos cómo el golpe a la economía de EEUU llega en varios formatos, no solo el del petróleo, y que la FED empieza a celebrar el “cuanto peor, mejor”: las guerras de Israel y Ucrania, la batalla comercial con China, la lucha contra la inflación, el inmobilario con las hipotecas cada vez más altas y las bancarrotas en una deriva en la que todo se soluciona a golpe de chequera y que conduce inexorablemente a Estados Unidos a una gran crisis de deuda.