MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
Ferrovial, la constructora encabezada por la familia del Pino, se convirtió la semana pasada en la primera cotizada perteneciente al Ibex 35 en debutar en el parqué neoyorquino a través del Nasdaq, tras cotizar ya en Ámsterdam (Países Bajos).
En concreto, los títulos de la compañía firmaron su estreno el pasado jueves 9 de mayo en la Bolsa estadounidense con un alza del 5%, pasando de los 38 dólares por acción de inicio a los 40 dólares de cierre. Esta semana, las acciones de la constructora han oscilado en torno a ese rango.
Por otra parte, cabe destacar que la negociación en Nueva York se limitó a 3,8 millones de dólares (3,5 millones de euros), es decir, un 88% menos que los 30,7 millones de euros que movió en Madrid ese día, una tendencia de escaso volumen de negociación que también se ha extendido a la primera semana completa de la compañía en el Nasdaq.
Al hilo de Ferrovial y su nuevo estreno bursátil, los analistas del mercado consultados por Europa Press han expresado sus dudas sobre si otras empresas podrían seguir el ejemplo de los Del Pino a la hora de lanzarse a cotizar en Estados Unidos.
El analista de XTB, Javier Cabrera, ha señalado que no ve a ninguna otra compañía que pueda realizar este movimiento, aunque ha reconocido que esto podría variar dependiendo de la suerte bursátil de Ferrovial: “Si resulta exitoso para Ferrovial, podríamos ver a otras empresas imitándolas en el futuro”.
En una línea similar, el responsable de análisis en la sociedad de valores Activotrade, Juan José del Valle, ha apuntado que no son conscientes o conocedores de otras compañías que se lancen a seguir el camino de Ferrovial, pero ha apuntado que otro caso “perfectamente asemejable” podría ser ACS, ya que más del 60% de sus ventas a cierre de 2023 provenían del país norteamericano.
Precisamente, el presidente de ACS, Florentino Pérez, descartó la semana pasada que esté “ahora mismo” entre sus planes que las acciones de la compañía pasen a cotizar también en la Bolsa de Estados Unidos.
Así lo aseguró durante su participación en la junta de accionistas de su constructora, en respuesta a una pregunta de un accionista, que recordaba la amplia presencia y negocio que ACS tiene en Estados Unidos.
“Estas son cosas que ahora mismo no contemplamos, cuando las contemplemos las traeremos aquí (a la junta)”, se limitó a decir el empresario ante los accionistas reunidos en un auditorio de IFEMA Madrid.
De vuelta con Ferrovial, cabe destacar que buena parte del volumen de negocio que ostenta en Estados Unidos ha sido finalmente un argumento de peso para explicar el movimiento de la compañía en dirección al parqué neoyorquino.
De hecho, esa concentración del negocio de Ferrovial en Estados Unidos podría escalar con más del 90% de las inversiones comprometidas para el período 2023-2027 en esta zona geográfica, según del Valle, que ha acompasado que tiene lógica “buscar un inversor norteamericano para una compañía que prevé que su negocio se concentre todavía más en Estados Unidos”.
Ligado a esto, un informe de la agencia S&P facilitado a Europa Press reseñaba que más del 90% del Ebitda generado por Ferrovial procede de Estados Unidos, en tanto que calificaron su movimiento de cotizar en ese país como “alineado” con su estrategia de centrarse en crecer en América del Norte y beneficiarse del apoyo con el que cuentan los mercados de infraestructura y construcción.
Cabrera, que se une a estos argumentos financieros, ha apuntado también que “la empresa decidió salir al Nasdaq por la exposición que esto podría darle”. Además, ha incidido esta fuente, a partir de ahora “podrá ser elegible” para los índices de Estados Unidos, como el Russell u otros.
Los directivos de la compañía ya apuntaron que prevén que a lo largo de los próximos años la cotización en Estados Unidos vaya ganando protagonismo, dejando incluso por detrás a la cotización española.
Para Cabrera, esta es la desventaja que podrían encarar las acciones que cotizan en Ámsterdam o en la Bolsa española al perder “algo de liquidez, lo que las pueden hacer menos atractivas para algunos inversores”.
Con todo, del Valle ha recordado que en términos de liquidez queda todavía “mucho camino” por recorrer porque, a día de hoy, ya contando la compañía con acciones que cotizan en tres Bolsas diferentes, más del 90% del volumen se está realizando en el mercado español, un dato que nos lleva de regreso al bajo volumen de negociación en Estados Unidos.
EL ESTRENO BURSÁTIL DE FERROVIAL
Entrando al detalle del estreno de Ferrovial en el Nasdaq, Cabrera ha puntualizado que se ha realizado a través de un ‘listing’, es decir, que son acciones de Ferrovial que ya existían y que ahora se puede comprar en el mercado americano.
En ese sentido, ha matizado que hay que tener en cuenta que los inversores americanos ya podían comprar ADRs de Ferrovial, que son unos títulos emitidos por bancos depositarios y que tienen como subyacente acciones de Ferrovial.
Por tanto, de esta manera no se tenían las acciones directamente, sino un título con la acción como subyacente. Con esta salida, ha remachado Cabrera, los inversores si que podrán comprar directamente las acciones en el mercado americano.
Con esta nueva vía, los inversores afincados en Estados Unidos podrán acceder al activo cotizado en sí de Ferrovial, que arroja una capitalización bursátil de unos 27.500 millones de euros, lo que le sitúa como el séptimo valor de mayor peso en el español Ibex 35.
EL TIPO DE CAMBIO EURO-DÓLAR, UN FACTOR A TENER EN CUENTA
Juan José del Valle (Activotrade) ha recordado que a favor de la ecuación de cotizar en Estados Unidos se encuentran elementos como el tipo de cambio, ya que el euro es una moneda más fuerte que el dólar (en las últimas semanas, el euro cotiza en torno a los 1,07 y los 1,08 dólares).
“La ventaja para un inversor norteamericano de poder comprar títulos de la constructora denominados en dólares”, ha incidido el ejecutivo de Activotrade, reside en evitar “un riesgo a la baja en el caso de la divisa comunitaria (euro), la cual ha caído cerca de una tercera parte de su valor en relación al dólar desde la última gran crisis de 2008”.