La inflación en Reino Unido cayó al 2,3% en abril, muy por debajo del aumento del 3,2% de marzo, pero por encima del 2,1% que pronosticaba el Banco de Inglaterra. Se encuentra en el nivel más bajo desde julio de 2021. Sin embargo, la inflación de los servicios fue mucho más alta de lo esperado. La inflación subyacente, que excluye la energía, los alimentos y el tabaco, cayó al 3,9%, desde el 4,2% en marzo, frente a la previsión del 3,6%.
Según esos datos, la posibilidad de un recorte de tipos de interés por el Banco de Inglaterra parece alejarse; el mercado cifra en un 18% la posibilidad de una bajada en junio, frente al 50% que se inclinaba por esa opción el pasado martes.