MADRID, 31 (EUROPA PRESS)
La entidad de banca privada atl Capital ha apostado por bonos, equilibrio entre acciones de Estados Unidos y Europa y oportunidad en mercados privados en un encuentro celebrado con los medios para presentar sus perspectivas de mercado de cara a 2024.
En concreto, de ellas se extrae que la renta fija “vuelve a ser un activo destacado” tras el buen desempeño del pasado año y recomiendan un equilibrio entre las acciones bursátiles de compañías ‘growth’ (con capacidad de crecimiento) de Estados Unidos y compañías ‘value’ (infraponderadas por el mercado) en Europa, en tanto que ven una “gran oportunidad” en los mercados privados por los descuentos en las valoraciones.
La entidad de banca privada ha profundizado que el contexto para 2024 es favorable bajo la premisa de una inflación en descenso y un crecimiento de los beneficios y márgenes empresariales, en tanto que la política monetaria será más laxa mediante una bajada de tipos de interés que, en cualquier caso, no será “tan agresiva” como descuenta el mercado, que proyecta más de cinco recortes empezando en la primavera.
Esto se debe, según atl Capital, a que los bancos centrales querrán estar seguros de que la inflación está controlada y no se produzcan efectos de segunda ronda, en tanto que en ese apartado el foco de atención estará puesto en la caída de la inflación subyacente y la evolución del desempleo.
Así, en el apartado ‘macro’, apoyado por estímulos adicionales como políticas fiscales expansivas, apuntan a que la economía mundial crecerá ligeramente por debajo del 3%, con desaceleración en todas las regiones, pero sin llegar niveles de recesión; asimismo, espera que Asía contribuya de forma significativa al crecimiento global.
Ese clima de optimismo lo ha resumido el socio y gestor de la firma, Mario Lafuente, aduciendo que “la sorpresa este año puede venir por el lado positivo ya que no hay estimaciones que apunten a una aceleración de las economías; sí esto se produce, podría influir muy favorablemente en los mercados”.
ESTRATEGIA DE INVERSIÓN
Bajo ese paraguas de previsiones, desde atl Capital han aducido que la renta fija sigue ofreciendo rentabilidades implícitas “muy atractivas” y, a medida que se consuman los recortes de tipos de interés, pondrán la mira en bonos de deuda corporativa tanto de alta calidad como ‘high yield’ (asumir más riesgo a costa de una mayor rentabilidad), deuda subordinada y emergentes.
En renta variable, han razonado que la apuesta por el equilibrio entre acciones ‘growth’ de EEUU y ‘value’ de Europa se debe, por un lado, a que “los múltiplos de las compañías europeas son más atractivos” y esperan un comportamiento positivo en los próximos dos años, mientras que las estadounidenses, como las grandes tecnológicas, aunque cotizan a precios elevados, “también proyectan crecimientos más elevados”.
En este tipo de activos, atl también ha subrayado en sus recomendaciones a las compañías de pequeña y mediana capitalización para este año por ofrecer valoraciones “muy atractivas” y por la expectativa de beneficiarse de “posibles operaciones corporativas proyectadas sobre este tipo de compañías”.
Por otra parte, han apuntado a la oportunidad que ahora se presenta en los mercados privados (que se caracterizan por su iliquidez) por las “atractivas valoraciones de los activos que están descontando con retraso el mal comportamiento de los mercados cotizados en el 2022”.
Además, han comentado como efecto positivo de este tipo de activos su descorrelación con otros activos que aporta diversificación y rentabilidad a las carteras: “es una gran oportunidad de inversión que generará rentabilidades por encima de la media del resto de activos en los próximos”, han incidido.
En otros mercados, han precisado que el euro oscilará en torno a una horquilla del 1,05-1,15 dólares en función del momento y la intensidad en los recortes de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE) y la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos.
Por el lado de las materias primas, atl prevé que el barril de petróleo Brent transite a lo largo del año entre los 70 y los 90 dólares, toda vez que el crecimiento económico se modere y no se produzca ningún acontecimientogeopolítico que altere el escenario económico. Ligado a esto, han pronosticado que el gas TTF, que se sitúa por encima de los 20 euros/MWh, mantenga unos precios moderados al no existir riesgos de desabastecimiento y con los inventarios en niveles máximos.