MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
La coalición de Gobierno de Alemania, liderada por el socialdemócrata Olaf Scholz, ha alcanzado un acuerdo sobre el borrador del proyecto para los Presupuestos de 2024, que evita la suspensión del freno de la deuda, a pesar del ‘agujero’ de 17.000 millones de euros derivado de la reciente sentencia del Tribunal Federal Constitucional, que anuló la transferencia de recursos contra la pandemia al fondo para luchar contra el cambio climático.
En una comparecencia conjunta al cumplirse un mes de la sentencia del Constitucional, el canciller germano, Olaf Scholz, acompañado del vicecanciller y ministro de Economía y Clima, el verde Robert Habeck, y del ministro de Finanzas, el liberal Christian Lindner, ha anunciado el acuerdo presupuestario por el que el Gobierno mantiene sus objetivos, aunque ha admitido que “habrá que arreglarse con menos dinero”.
De este modo, Scholz ha asegurado que Berlín seguirá así impulsando sus objetivos de transformación climática, refuerzo de la cohesión social y apoyo a Ucrania contra Rusia.
“Estos tres objetivos continúan guiándonos. Pero está claro que tenemos que arreglárnoslas con mucho menos dinero”, ha reconocido el canciller alemán, señalando la necesidad de priorizar y determinar “qué podemos permitirnos y qué no”.
En este sentido, ha subrayado que el proyecto presupuestario para 2024 cumplirá con el freno de la deuda, la cláusula establecida en la Constitución de Alemania que prohíbe todo incremento del déficit superior al 0,35% del PIB nominal salvo la declaración de emergencia nacional, por lo que el ajuste necesario de 17.000 millones de euros se llevará a cabo principalmente “aboliendo subsidios y gastos perjudiciales para el clima”, así como reduciendo ligeramente los gastos en todos los departamentos y los subsidios federales.
Asimismo, ha señalado que el instrumento central del Gobierno federal para la transformación climáticamente neutra del país seguirá siendo el Fondo para el Clima y la Transformación, aunque ha explicado que, debido a las exigencias del Tribunal Constitucional, el año que viene se reducirá su capacidad de gasto en 12.000 millones, con un ajuste de 45.000 millones en el periodo planificado hasta 2027.
Por otro lado, el canciller alemán ha reiterado el apoyo de Alemania a Ucrania contra Rusia, lo que se traduce en que el presupuesto ordinario seguirá contemplando una ayuda de 8.000 millones de euros en armamento y apoyo financiero a Ucrania y otros 6.000 millones para los refugiados ucranianos en Alemania.
“Se trata de recortes y ahorros. No nos gusta hacerlo, por supuesto, pero son necesarios para poder llegar allí con el dinero que tenemos disponible”, ha afirmado Scholz.
De su lado, el vicecanciller y ministro de Economía y Clima, Robert Habeck, considerado el ‘perdedor’ de las negociaciones al no suspenderse el freno de la deuda, ha destacado que el acuerdo que será presentado a los grupos parlamentarios mantiene el equilibrio entre seguir invirtiendo en seguridad social e impulsar la estabilidad y la renovación económica, además de garantizar el apoyo a Ucrania.
En cuanto a los recortes en algunos programas, el líder de los verdes alemanes ha reconocido que “le duele” el ajuste pactado para la industria solar, pero ha defendido que ese es el precio por mantener los componentes centrales, incluyendo la construcción de una economía del hidrógeno, la descarbonización de la industria, así como también programas para los ciudadanos.
“El esfuerzo general ha sido exitoso y ahora estamos nuevamente creando una base para que el país invierta en el país”, ha apostillado.
El ministro de Finanzas, Christian Lindner, defensor de la regla que limita el endeudamiento, ha señalado, por su parte, que la orientación hacia el freno de la deuda sigue siendo de gran importancia para el Gobierno, destacando que, si bien en 2021 la ratio de deuda de Alemania era del 69% del PIB, el año que viene la previsión es del 64%, y mientras que el déficit en 2021 fue del 3,6% se espera que el desequilibrio presupuestario se reduzca en 2024 al 1,5% del PIB.
“Hemos trabajado intensamente y podemos presentarnos hoy aquí ante ustedes con la señal clara de que esta coalición es capaz de actuar y llegar a acuerdos, incluso en tareas muy difíciles”, ha destacado.
El pasado 15 de noviembre, el Tribunal Constitucional Federal de Alemania dictaminó que la enmienda presupuestaria que permitió al Gobierno alemán transferir 60.000 millones de euros en recursos contra la Covid-19 a un fondo para combatir el cambio climático era incompatible con los requisitos constitucionales y por lo tanto debía considerarse nula.
El Ejecutivo alemán introdujo retroactivamente una enmienda para permitir al Fondo de Energía y Clima tomar prestados 60.000 millones de euros en recursos contra la Covid no utilizados en el ejercicio 2021 y su uso en ejercicios fiscales posteriores.
Esta transferencia se realizó con carácter retroactivo en febrero de 2022 y el Fondo de Energía y Clima pasó a denominarse Fondo de Clima y Transformación.
En su decisión, el Tribunal concluyó que dicha enmienda no cumplía los requisitos constitucionales para el endeudamiento de emergencia, apuntando que el legislador no demostró suficientemente la necesaria conexión fáctica entre la emergencia y las medidas de gestión de crisis adoptadas en respuesta y que desvincular la declaración de emergencia del uso efectivo de las autorizaciones de empréstito “es incompatible con los principios constitucionales” de presupuestación anual.
Por lo tanto, el Constitucional consideró “inadmisible” el uso ilimitado de facto de autorizaciones de endeudamiento de emergencia en ejercicios fiscales posteriores sin contabilizarlas para la regla del “freno de deuda” (Schuldenbremse) para esos años y, en su lugar, contabilizarlas como “deuda” para el año fiscal 2021.