MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El stock de saldo impagado siguió experimentando un “fuerte descenso” en el pasado mes de diciembre por la venta de carteras de operaciones de varios clientes, según el ‘Informe de Tendencias de Crédito’ de enero de 2023 elaborado por la Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito (Asnef) y Equifax.
A pesar de esta tendencia a la baja en el saldo de crédito dudoso, el informe llama a mantener la prudencia y esperar a los próximos meses para ver si se mantiene en estos niveles. En este sentido, destaca que la caída se registró tanto en el caso de personas físicas como en personas jurídicas.
Por otro lado, se recoge que el perfil de riesgo de la demanda (‘hit-rate’), que mide el porcentaje de deudores encontrados en el archivo de Asnef sobre el total de consultas de crédito, continuó con la tendencia bajista, situándose en un 83% a cierre de 2022, muy cerca de su valor mínimo de los últimos cuatro años.
Por su parte, la demanda de crédito global cerró 2022 en un 103%, unas cifras similares a las registradas al inicio de 2020, de tal manera que demostró unos niveles “muy estables” y mantuvo su tendencia positiva.
Por sectores, la demanda de crédito aumentó especialmente en las financieras de consumo y en las microfinancieras, registrando ambas sus valores más altos de los últimos años, con un 141% y con un 160%, respectivamente.
Por su parte, la demanda de crédito en el sector de la automoción se mantuvo en niveles estables mientras que, en el caso de la banca, cerró 2022 por debajo de los niveles prepandemia.
Por último, en el ámbito del recobro, durante los últimos meses se experimentaron algunas fluctuaciones hasta cerrar el año en un 91%. Después de alcanzar máximos del 126% en octubre, este indicador, que mide el flujo de recuperación de saldo vencido en gestión, acaba el 2022 en niveles similares a los de antes de la pandemia.