MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha alertado sobre la “delicada” situación de los productores de carne de conejo españoles como consecuencia del alza de los costes de producción, lo que pone en peligro las 1.550 granjas cunícolas existentes, al borde de la quiebra técnica.
En concreto, según la organización agraria, los precios pagados a los ganaderos durante la última semana, (entre 2,55 y 2,60 euros por kilogramos), se sitúan “una vez más” por debajo de los costes de producción (entre 2,75 y 2,80 euros por kilo).
Según la organización agraria, la “brutal” subida de los principales costes de producción, entre ellos el gas, electricidad o los piensos, ha acelerado el proceso de desmantelamiento del sector cunícola, que ha registrado una caída del 44% de las explotaciones, desde las 3.355 en 2021 a las 1.550 este año, lo que ha supuesto una reducción del 23,4% de la producción en los últimos cinco años.
“Somos conscientes de que todos los sectores están sufriendo la crisis energética y la inflación, pero en el sector cunícola se agrava la situación porque somos un sector muy debilitado desde hace años. No podemos repercutir todo el incremento de costes en el precio final y eso nos ha llevado a economías muy débiles y de subsistencia. La situación es dramática en muchos casos, granjas llenas de conejos que tienen que cerrar porque no pueden pagar las facturas de electricidad y gas”, ha lamentado el responsable del sector cunícola de COAG, José Luis Santaclara.
Ante esta situación, desde COAG se reclama al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y a las Comunidades Autónomas un plan de rescate urgente para los ganaderos del sector cunícola que recoja, entre otras medidas, un “ambicioso” paquete de ayudas directas que inyecten liquidez en las explotaciones para poder afrontar el pago a proveedores.
“Las recientes ayudas por el impacto de guerra de Ucrania han resultado totalmente insuficientes”, han señalado desde la organización agraria, que reclama además una moratoria en el pago de las facturas de energía y en el pago de las deudas durante el periodo que dure esta crisis, así como educciones fiscales para amortiguar el coste del gas y la electricidad.
Además, en opinión de COAG, es urgente que la AICA refuerce las inspecciones en el sector para velar por el “estricto” cumplimiento de la Ley de Cadena Alimentaria.