MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
El desarrollo del biogás en España requiere de mecanismos de apoyo y un marco normativo y fiscal que regule sus aplicaciones no eléctricas, según el informe ‘El biogás y el biometano como palanca clave en la descarbonización de la economía española’, elaborado por PwC y el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat), y publicado por la Fundación Naturgy este jueves.
En esa línea, los mecanismos de apoyo deben centrarse en la financiación de los costes de inyección, en la compensación del valor de los derechos de emisión y en garantizar la venta a un precio resultante de una “subasta competitiva”, añade el análisis.
Con ese tipo de medidas se podrá conseguir que el uso del biogás sea una “solución esencial” en la reducción de la dependencia energética exterior de la Unión Europea (UE), así como para la gestión y aprovechamiento de residuos y también en la minoración de las emisiones, consideran los autores del estudio.
El informe se ha presentado este jueves en un evento en el que han participado expertos de distintos sectores, los cuales han coincidido en señalar la necesidad del apoyo institucional para el desarrollo del biogás y el biometano.
Así, el CEO de Nedgia, Narcís de Carreras, ha destacado que el plan REPowerEU de la Comisión Europea ha puesto el biometano en primer plano y ha incidido en que “el potencial de España es espectacular, el tercero mayor de Europa”.
Además, ha valorado la producción de biometano como una alternativa en el corto plazo para reducir la dependencia del gas natural, por lo que aboga por impulsar un “plan concreto” para implantar el sistema de garantías de origen, cuyo esquema de funcionamiento se aprobó recientemente, y también reclamó medidas para acelerar la tramitación de permisos.
“En Francia, en 12 meses puedes construir una planta, pero en España los periodos son mucho más largos”, ha lamentado.
La Hoja de Ruta del Biogás, aprobada el pasado marzo, plantea multiplicar por 3,8 su producción hasta 2030, superando los 10,4 teravatios hora (TWh), y prevé que ese mismo año al menos un 1% del gas consumido a través de la red de gas natural sea biometano.
No obstante, “la cuota impuesta estimada para el biometano en países líderes a nivel europeo es de alrededor del 10% del consumo final de gas para el año 2030, o incluso del 20% en el caso de Alemania”, ha explicado el socio líder del Sector Energía de la consultora PwC, Óscar Barrero.
El potencial del biometano en España es “mucho mayor”, ahonda la Fundación Naturgy en referencia a datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (Idae), que lo calcula en 34 TWh/año, “tres veces más que el objetivo de producción del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (Pniec) 2021-2030”, agrega.
“Considerando el máximo potencial posible de producción de biogás, se podría llegar a sustituir hasta el 32% de la demanda nacional de gas natural en 2021 con una reducción de la huella de carbono asociada al sector gasista de entre un 20% y un 56%”, ha recalcado la directora del departamento de Energía del Ciemat, Mercedes Ballesteros.