En la reunión de este martes en SIMA no se ha conseguido un acuerdo entre easyJet y USO
MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
easyJet se ha mostrado “decepcionado” con las nueve jornadas de huelga de 450 tripulantes de cabina de pasajeros (TCP) españoles convocadas por USO para desbloquear la negociación del II Convenio Colectivo.
En concreto, la huelga está convocada para los días 1, 2, 3, 15, 16, 17, 29, 30 y 31 de julio, con una duración de 24 horas, para las bases que tiene la aerolínea en España, en los aeropuertos de Barcelona-El Prat, Málaga y Palma de Mallorca, que cuentan con seis, siete y cinco aviones, respectivamente.
En caso de que la acción sindical se lleve a cabo, la aerolínea ha admitido que es “previsible” que se produzcan “algunas interrupciones” en su programa de vuelos hacia y desde Málaga, Palma y Barcelona durante ese período.
“A día de hoy, planeamos operar su programa completo y aseguramos a los clientes que haremos todo lo posible para minimizar cualquier interrupción”, ha prometido la compañía aérea.
El secretario general de USO en easyJet Málaga, Miguel Galán, ha explicado que, actualmente, los tripulantes de easyJet en España tienen un salario base de 950 euros, que son 850 euros menos que el salario base de Francia o Alemania, “rozando el salario mínimo interprofesional”.
Por tanto, el sindicato pide una subida de alrededor del 40% del salario base, a lo que se sumaría el complemento por el número de horas de vuelo.
PRIMERA REUNIÓN SIN ACUERDO
USO no ha conseguido un acuerdo con easyJet en su reunión de este martes en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) para desbloquear la situación, por lo que continúa con la convocatoria de nueve jornadas de huelga.
Además, desde el sindicato han afirmado la disposición la compañía aérea de continuar las negociaciones hasta el 30 de junio.
Entre otras mejoras que USO reivindica para el nuevo convenio están el incremento del salario básico, incluir el pago de complemento por antigüedad, un incremento salarial según el IPC, retribución de las horas de formación, abono de los costes de manutención de los tripulantes en los “cursos de refresco” fuera del territorio nacional.
A estas medidas se unen la limitación de vuelo similar a la de otros países para favorecer el descanso de las tripulaciones y la conciliación, la renovación anual de toda la uniformidad y que se incluya también el calzado.