Los seguros de automóviles y de responsabilidad civil son los más propensos a sufrir intentos de fraude, según el ICEA
MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
Las reclamaciones fraudulentas son más frecuentes entre los seguros de los automóviles y responsabilidad civil, que representan más de la mitad de los intentos de estafa a las aseguradores, según un estudio presentado este miércoles por Investigación Cooperativa entre Entidades Aseguradoras (ICEA) en la jornada de la Lucha contra el fraude en seguros.
Así, según este informe, una de cada diez solicitudes de indemnización por lesiones en accidentes de tráfico esconde un intento de estafa y un 6% de las denuncias de robo de vehículos son falsas. Además, el 2,22% de los daños materiales en vehículos son fraudulentos y un 11% de los importes solicitados a las aseguradoras por la sustracción de un vehículo podría tener algún componente fraudulento.
El predominio de este ramo, que representa el 66% de los casos de fraude entre los seguros, se debe, según apuntan desde ICEA, a su destacada presencia social.
Los seguros de diversos son el segundo grupo que más intentos de estafa sufre, el 30% de los casos, entre los que se engloban los seguros de pólizas de hogar, comercio, comunidades de propietarios, empresas y responsabilidad civil.
LOS SEGUROS DE RESPONSABILIDAD CIVIL, EL MAYOR IMPACTO ECONÓMICO
Detrás del seguro del automóvil, los seguros de responsabilidad civil son los más expuestos a intentos de fraude, principalmente en lo que se refiere al aspecto económico. “Aunque apenas el 1,76% de los percances motivados por estas pólizas esconde un fraude, el peso de las reclamaciones indebidas sobre el total es mucho mayor”, han señalado desde ICEA.
En concreto, tras el 10% de los pagos solicitados por siniestros de responsabilidad civil hay una reclamación injustificada. Además, en el último año se han incrementado enormemente los intentos de fraude, pasando del 0,76% de los casos al 1,82%.
En términos monetarios, su huella económica ha pasado de ser el 2,40% de las indemnizaciones reclamadas en 2019 al 2,56% en 2020, y al 2,95% en 2021.
Otro 3% de los intentos de fraude se produce en los ramos de vida, accidentes y salud. Es decir, en los llamados seguros personales. El 0,5% restante corresponde a otras líneas de negocio.
“El fraude es un delito que perjudica a la sociedad en su conjunto”, han querido resaltar durante la jornada de lucha contra el fraude. “Cuando un defraudador plantea una reclamación indebida o exagerada, lo que hace es tratar de obtener un beneficio que no le corresponde a costa del resto de asegurados, que son honrados”.