El Banco de Inglaterra eleva los tipos de interés a su nivel más alto desde la crisis financiera y advierte que el crecimiento económico del Reino Unido corre el riesgo de verse aplastado por una inflación de dos dígitos.
El aumento del 0,75% al 1% fue respaldado por seis de los nueve responsables políticos del banco, tres de los cuales votaron a favor de un movimiento de 50 puntos básicos. Pero los pronósticos nefastos que indican un riesgo de recesión han provocado caídas tanto en la libra como en los rendimientos de los bonos del gobierno.
Las severas previsiones presentadas por el banco central del Reino Unido coinciden con la advertencia del miércoles del presidente de la Reserva Federal de EE. UU., Jerome Powell, de que controlar la inflación podría causar “algo de dolor”.
Si bien el banco predice que el Reino Unido evitará una recesión técnica (dos trimestres consecutivos de contracción), dijo que la producción colapsará cerca de un 1% en el último trimestre de este año. En 2023, se espera que el PIB anual se reduzca en un 0,25 %.
Ayer en EE.UU., Jerome Powell descartaba una recesión mientras el mercado da por hecho que la Reserva Federal subirá de nuevo los tipos de interés en 50 puntos básicos en las próximas reuniones.
Futuros de Wall Street, después de que ayer el S&P 500 subiera con fuerza, tras una subida de los tipos de interés de medio punto. En cierto modo, esto no es demasiado sorprendente, simplemente pone de manifiesto que la Fed es muy consciente de la necesidad de preparar a los mercados para sus movimientos. La historia también respalda esta idea, aunque con pinzas.
Como vemos en el gráfico la renta variable también subió el día de la última subida de medio punto, en mayo de 2000. El Nasdaq y el S&P 500 no tardaron en caer después de esa subida, y luego se tambalearon al alza durante unos meses más antes de iniciar una caída de dos años cuando la Reserva Federal consiguió frenar la economía.
El BCE y el BoJ son los únicos grandes bancos centrales que no han subido el precio del dinero en esta nueva etapa marcada por la inflación
Por cierto, Elon Musk obtiene 7.100 millones de dólares para financiar la compra de Twitter… Entre los inversores que respaldan la adquisición están el cofundador de Oracle, Larry Ellison, la firma de capital riesgo Sequoia y Binance. El multimillonario Ellison ha contribuido con 1.000 millones de dólares, lo que lo convierte en el mayor patrocinador nuevo. Sequoia ha aportado 800 millones y Binance 500. Estos nuevos apoyos ayudarán a Musk a reducir el préstamo que ha tomado de 12.500 millones a 6.250 millones.
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