Casi 19 de cada 100 contratos firmados en el segundo mes del año tenía una duración igual o inferior a siete días y 22 de cada 100 eran fijos
MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
La duración media de los contratos inscritos en los servicios públicos de empleo durante el mes de febrero fue de 57,83 días, la cifra más alta en este mes desde el año 2015, cuando se situó en 58,28 días de media, según datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) recogidos por Europa Press.
El dato de febrero (57,83 días) supera además al del mes de enero de este mismo año, en el que la duración media de los contratos fue de 52,21 días.
En total, en febrero se registraron en los servicios públicos de empleo 1.444.057 contratos, un 19,1% más que en el mismo mes de 2021. De todos ellos, 316.841 fueron contratos indefinidos, la mayor cifra de toda la serie histórica.
Este volumen de contratos fijos es un 139,2% superior al de febrero de 2021 y representa el 21,94% del total de contratos efectuados en el segundo mes del año.
Este importante impulso a la contratación indefinida se atribuye desde el Gobierno a la reforma laboral, en vigor desde finales de diciembre. Dicha reforma establece el contrato indefinido como el ordinario, pone fecha al fin de los contratos por obra o servicio y desincentiva los contratos de muy corta duración mediante una penalización en las cotizaciones empresariales.
En los dos primeros meses del año, periodo en el que lleva en vigor esta reforma, se han realizado 555.513 contratos fijos, más del doble que en enero y febrero de 2021 (+116,5%).
CASI TRES DE CADA DIEZ CONTRATOS DURAN MENOS DE UN MES
La duración media de los contratos de febrero escaló a máximos desde 2015 (58,28 días). Desde entonces hasta 2022 la duración media de los contratos en los meses de febrero se ha movido por encima de los 50 días, llegando a alcanzar los 55,54 días en 2017, los 55,93 días en 2018, los 56,13 días en 2021 y ahora los 57,83 días en 2022.
Según los datos del SEPE, el 18,7% de los contratos inscritos en febrero tenía una duración igual o inferior a siete días. Esta proporción ha mejorado respecto a febrero de 2021, cuando uno de cada cinco contratos duraba menos de una semana (19,7%) y también con respecto a enero de este año, mes en el que este porcentaje era del 21%.
Concretamente, de los 1.444.057 contratos registrados en febrero, 270.036 tenían una duración igual o inferior a la semana.
Si se analizan los contratos con una duración igual o inferior a un mes, los datos del SEPE revelan que el 29,1% de los que se inscribieron en febrero igualaba o no llegaba al mes de vigencia, porcentaje que hace un año superaba el 32,6%. En total, en febrero de este año se registraron 421.509 contratos de un mes de duración o inferior al mes.
Por su parte, 63.221 contratos (el 4,37%) presentaban una duración de entre una semana y 15 días, mientras que 88.252 (el 6,1%) tenían una duración de entre 15 días y un mes.
No obstante, hay que tener en cuenta que entre noviembre y febrero se hacen muchos contratos de corta duración para afrontar diferentes campañas comerciales, como el Black Friday, el Cyber Monday, la Navidad y las rebajas de invierno.
EL PESO DE LOS FIJOS SE DISPARA 11 PUNTOS
Con entre uno y tres meses de duración se efectuaron 147.821 contratos en febrero (el 10,2% del total), mientras que los contratos de entre tres y seis meses sumaron 114.045 (el 7,9% del total).
Por último, de entre seis y doce meses de duración se registraron 20.214 contratos (el 1,4%), en tanto que 3.493 contemplaban una duración superior al año (el 0,2% del conjunto de contratos).
Asimismo, en el registro del SEPE figuran en febrero 420.134 contratos de duración indeterminada y 316.841 contratos indefinidos, cifra ésta última que equivale al 21,94% del total de contratos.
Este porcentaje supera en once puntos el registrado en febrero de 2021, cuando sólo el 10,9% del total de contratos era indefinido.