MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
Alsa obtuvo un beneficio neto de 35,2 millones de euros en 2021, frente a las pérdidas de 105,2 millones de euros que se anotó en 2020, a raíz de la progresiva recuperación de la demanda para viajar en sus autobuses de largo recorrido, una vez se han ido levantando las restricciones a la movilidad.
En concreto, sus rutas urbanas se encuentran ya al 73% de los niveles anteriores a la pandemia, mientras que las de largo recorrido sitúan su demanda al 48% de la que registraban en 2019 –en el primer confinamiento se redujo a solo el 5%–, según informa National Express, compañía británica propietaria de la empresa española de transportes.
Con estos datos, Alsa logró aumentar su facturación un 33%, hasta los 835,8 millones de euros el año pasado, acercándose cada vez más a los 940,6 millones de euros que ingresó en 2019, así como multiplicar por casi nueve su beneficio operativo, que fue de 65,9 millones de euros el año pasado.
La marca Alsa también opera en Marruecos, donde el número de viajeros aumentó un 50% frente al ejercicio inmediatamente anterior a la pandemia, gracias a los nuevos contratos en Casablanca, Rabat y la ampliación de la red en Tánger.
En 2021, la compañía adquirió la concesionaria del transporte urbano de Granada y se adjudicó las operaciones en Jaén, además de firmar un nuevo contrato en Guipúzcoa, proyectos que contribuirán a su crecimiento futuro.
De cara a 2022, Alsa iniciará sus nuevos contratos en Lisboa y Oporto y espera nuevas oportunidades de negocio en Francia e Italia, tras firmar en España un contrato para la gestión del servicio de alquiler de bicicletas de León y operar en Torrejón de Ardoz (Madrid) el primer autobús urbano de hidrógeno una línea urbana en España, en el marco de su objetivo de contar con una flota cero emisiones en 2035.
“Hemos avanzado como compañía en este último año. Hemos crecido sobre la base de una progresiva recuperación de la demanda y especialmente por la incorporación de nuevas operaciones de transporte urbano y metropolitano en España y Marruecos. No obstante, todavía estamos lejos de la cifra de ingresos anterior a la pandemia, lo que no nos ha impedido mantener la apuesta por las tecnologías limpias, que son la clave de la transición a la movilidad sostenible que venimos liderando en el sector”, señala el consejero delegado de Alsa, Francisco Iglesias.